Inicio Opinión Nacho Elbal El cretino de la pintada.

El cretino de la pintada.

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Hace unos días, el Atlético Sabiote venció por 3-0 al Sporting de Torreperogil en un derbi comarcal  que, hasta ese día, gozaba de una rivalidad sana. Sin embargo, el campo San Ginés de la Jara de Sabiote se despertó una mañana con una pintada ofensiva y de muy mal gusto. Algún crío al que deberían de prohibirle ver tanta televisión, o tal vez un aficionado desequilibrado, acostumbrado a rebuznar improperios desde la grada mientras sostiene un whisky con seven up, dejó un mensaje anónimo y cobarde grabado en la puerta del campo: «Ultras Sporting, Puta Sabiote».

La gamberrada, condenada en seguida por los representantes del Sporting, hirió tanto la sensibilidad de los directivos del Sabiote que, sin dudarlo, tomaron medidas contra todos los aficionados de la localidad vecina. Justos por pecadores. El derbi, esperado desde hace semanas por su histórica rivalidad y por la cómoda posición que ocupan ambos equipos en la clasificación, tuvo diferentes tarifas de precios. Si el aficionado era vecino de Sabiote, su entrada tenía un precio; pero si por el contrario acudía desde otra localidad, el costo de la entrada se incrementaba de forma considerable.

Triunfó el imbécil de la pintada, una grosería vomitada por un cerebro a medio camino entre la ignorancia y la cobardía. Logró incendiar esa rivalidad sana y pagó el ciudadano de a pie. El de siempre. A veces, es inevitable pensar que la capacidad intelectual entre el simio y el cretino prácticamente roza la similitud. Pero venció. Ganó el derbi. Ahora los aficionados se enfrentan y se insultan en los foros. Abrió una herida que tardará algún tiempo en cicatrizar. Me pregunto quién de todos estos anónimos es el menos inteligente.