Inicio 1ª División Otro clásico impredecible.

Otro clásico impredecible.

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¿Alguien sabría decir cuantos clásicos llevamos en los últimos cinco años?  Si necesitan más de veinte segundos para responder es que les pasa igual que a un servido, le ha perdido el gusto. Da igual si Messi puede añadir un gol y otra jornada seguida marcando a su ya inigualable récord; o si Cristiano volverá a reivindicarse en un derbi como lleva sucediendo en los cinco o seis últimos. La cuestión es que, de los últimos  enfrentamientos, el partido de este martes puede depararnos más de una sorpresa.

En dos equipos plagados de jugadores jóvenes y de talento, las claves, a mi entender, estarán en los llamados veteranos. Veremos en qué estado se encuentra Xabi Alonso, Ramos, Puyol, Alves o Xavi. Y es que, cada vez le doy más la razón a Don Santiago Bernabeu, quien decía aquello de: “No hay jugadores jóvenes y viejos, solo los hay buenos y malos”. A estos últimos nombres debería haber añadido los de Messi y Cristiano, pero es que, mire usted, no creo que estas dos criaturitas necesiten que un junta-letras como yo los tome en consideración para un partido como éste.

Llega el Madrid con casi medio año de fútbol inenarrable (por lo poco fácil que es saber a qué juega este equipo, no se vayan a creer…), y el Barcelona, lo más parecido a un aficionado escocés: sabes que llevas falda, te sienta bien y te cubre, pero al más mínimo soplo de viento…te dejas ver lo que antaño ocultabas con un simple adelanto de la línea de presión. En este caso puede resultar paradójico que uno de los dos equipos presumiblemente más fuertes de Europa (la debilidad de la liga BBVA deja esto bastante en entredicho) se pueda ver con la falda levantada y pensando, ¿Dónde estoy?

Con el favorito menos claro de todos los clásicos jugados en los últimos años, la noche se presenta más difícil de predecir que ninguna, y las consecuencias de la eliminación de un equipo u otro menos claras aún. Por si fuera poco, unos y otros se han encargado de calentar un partido que parecía tranquilo, con esas declaraciones en rueda de prensa de Roura (esta no es su guerra) y la posterior respuesta de Mourinho (que se apunta a un bombardeo). Esperemos que la cosa no vaya a más y el partido se desarrolle por los cauces en los cuales se habían desarrollado los últimos derbis, y que a los aficionados se nos deje saborear lo que realmente nos interesa: la pelotita y lo verde.

Disfrutemos entonces de un partido de fútbol. Dejemos de pensar en qué situación quedará un equipo u otro al acabar esta semanita que le espera a cada uno, y recordemos una frase del mítico entrenador madridista Vujadin Boskov: “El fútbol es impredecible, por eso empieza 0-0”