Inicio Opinión Antonio Oliver Casillas/Diego: hablar por hablar.

Casillas/Diego: hablar por hablar.

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La objetividad no existe. Hablar de las cosas crea realidad. Además, si se trata de fútbol, el  intento de acercarse a la objetividad ya es sospechoso. Llevamos semanas instalados en el debate de la portería madridista. Curioso. El único problema que el Real Madrid no tiene es ese. Sin embargo, hay un interés desmedido en poner a jugar a Casillas a sabiendas de que en este momento no está. El debate es falso y lo saben quienes lo promueven. Pueden decir hasta cansarse que Iker tiene que jugar, no puede. El problema, tengo la sensación, es que no se trata de un debate deportivo y sí de una disputa cortesana en la que unos pagan favores, otros ponen a prueba su jerarquía, algunos azotan a Mou con una encendida defensa de Iker y hay  quien sigue la música de la banda.

Mou ha tomado decisiones incomprensibles, pero la de no contar ahora con Casillas es futbolística por los cuatro costados. Esa naturaleza inequívocamente deportiva de la decisión, al margen de desencuentros anteriores con el portero, es lo que se quiere emborronar con una ceremonia de agravios, menosprecios y cariños debidos. Nadie cuestiona la calidad de Casillas, nadie ha dicho que no sea una parte brillantísima de la historia futbolística de España, no se trata de eso, pero como lo deportivo no se puede defender con argumentos serios, como ocurre siempre se apela a las grandes palabras, al honor y al respeto debido al héroe. Vale, si es por eso que juegue pero por seguridad, eficacia y cumplimiento acreditado, hoy, el portero de garantía es Diego López. Mañana el fútbol, que no se queda con nada de nadie, dirá.