Inicio 1ª División El Madrid se da un festín antes de viajar a Turquía.

El Madrid se da un festín antes de viajar a Turquía.

Compartir

Imagen: EFE.

Las tardes en el Bernabéu son sinónimo de espectáculo, y no es para menos después de ver un partido como el de hoy en el que el equipo de José Mourinho le endosó una manita al Levante.

Las resacas de Champions no existen para el Real Madrid, da igual que la Liga esté prácticamente imposible, un partido es un partido y más si es ante tu afición. Como si de una obra de teatro se tratase, hoy era turno para los llamados actores secundarios, encabezado por un Kaká dispuesto a luchar por un papel más importante y un Higuaín que salió con el objetivo de despertar viejas ilusiones y con el deseo de que el Bernabéu le vuelva a situar en el Olimpo de esos ídolos que hacen vibrar los cimientos de Chamartín.

A pesar del resultado, el inicio del partido fue un mar de dudas, el Madrid desplegó un juego contrario al habitual, posesión empalagosa y poco peligro para Munúa, quizás debido a la ausencia de los maestros del contragolpe (Cristiano, Özil y Di María). El trabajo defensivo del Levante era bestial pero nada más, las jugadas de ataque eran prácticamente inexistentes y los locales vivían metidos en campo granota. Los minutos pasaban sin más, mientras unos aguantaban y otros intentaban abrir el marcador en cualquier despiste.

Pero si algo te enseña el fútbol es que es impredecible, cuando corría la media hora de juego en uno de los escasos contragolpes del Levante y tras un centro milimetrado de Pedro Ríos a Michel llegó el primer gol. La alegría granota fue breve, como ocurre en los libros de mitología griega, si enfadas a los dioses estos te castigan sin piedad, y eso fue lo que pasó. Solo 5 minutos después, Higuaín metía uno de esos goles cuya foto merece ser colgada en los pasillos del estadio, Xabi Alonso dio un pase de los suyos para que el argentino fusilara de media volea la portería de Munúa.

Sin apenas terminar de celebrar el gol, Clos Gómez pitó penalti tras una mano absurda de Lell. Kaká con la elegancia que le caracteriza ejecutó el penalti a la perfección culminando la remontada antes de llegar al final de la primera parte.

Tras el parón José Mourinho decidió meter a su caballo ganador, Cristiano Ronaldo, y dio salida a Callejón. Aún no estaba nada decidido pero el Levante se metió atrás quizá ante el temor de una posible goleada, un estilo de juego parecido al del inicio del partido pero con diferentes circunstancias, el Madrid mucho más relajado llegaba con más claridad al área rival. El Levante por el contrario acusaba el cansancio físico y contener al Real Madrid era cada vez más difícil. Avisaban tanto Higuaín como Benzema pero no terminaban de definir el gol de la sentencia.

Casi como un déjà vu” de la primera parte el Levante armaba una contra peligrosísima que Barkero mandaba alto.  Tuvimos que esperar a la recta final del partido para volver a ver cambiar el marcador, Cristiano Ronaldo volvía aparecer como siempre marcando su gol en el minuto 82 dando la sentencia al Levante. A partir de este momento empezó la fiesta, con el tridente letal (Cristiano, Özil y Di María) sobre el campo hicieron de las suyas, una triangulación perfecta que terminó por finalizar el alemán para poner el cuarto en el marcador.

Castigo innecesario el que estaba sufriendo el equipo de Juan Ignacio que sin embargo no concluyó ahí, en el tiempo de prolongación volvía a aparecer Özil para firmar la manita y llegar con la euforia por las nubes a Turquía a finiquitar el pase a la semifinal de la Champions.

Alineaciones:

 ·Real Madrid: Diego López, Arbeloa, Pepe, Sergio Ramos, Marcelo, Xabi Alonso, Modric, Callejón (Cristiano Ronaldo, min.46), Kaká (Di María, min.57), Benzema (Özil, mi.77), e Higuaín.

 ·Levante: Munúa, Lell, Ballesteros, Vyntra, Juanfran, Diop, Iborra, Pedro Ríos (Valdo, min.69), Míchel (Barkero, min.77), Rubén y Acquafresca (El Zhar, min.69).

Goles: 0-1, m.31: Míchel

1-1, m.36: Higuaín

2-1, m.39: Kaká de penalti

3-1, m.85: Cristiano Ronaldo

4-1, m.87: Özil

5-1, m.90: Özil.

 

Árbitro: Clos Gómez (Comité Aragonés). Amonestó a Sergio Ramos (60), por el Real Madrid.

Incidencias: encuentro correspondiente a la trigésima jornada de la Liga BBVA disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante unos 64.000 espectadores. Hizo el saque de honor el secretario general de las Naciones Unidas, el surcoreano Ban Ki-moon.