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Ancelotti

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ancelotti2Luca Caioli.
Escritor y periodista.

Paolo Maldini lo dice sin pelos en la lengua: “No sirve de nada ser el Special One, Two, o Three para triunfar. Basta con tener equilibrio y mantenerse por debajo del podio de quienes hacen los fuegos artificiales delante de las cámaras”. Así habla la bandera del Milán de su compañero y entrenador Carlo Ancelotti, en el prólogo de la autobiografía del nuevo mister del Real Madrid. “Preferisco la Coppa” (“Prefiero la Coppa”) es el irónico título del libro. Se refiere a los trofeos y a la coppa, embutido de lomo de cerdo, típico de Emilia Romagna, la región donde nació el hombre de 54 años que tiene el reto de hacer olvidar a José Mourinho.

Que Carletto tenga poco que ver con su predecesor es sabido y resabido. Por su historia, por su trayectoria, por su forma de ser. Nació en Reggiolo en el seno de una familia de  campesinos y nunca ha olvidado sus orígenes y el gusto por la tierra.  Ha sido futbolista ¡Y qué futbolista! Centrocampista en el Reggiolo, en el Parma, en la Roma y en el  aquel Milán que revolucionó el fútbol europeo a finales de los años 80. Era el Milán que ganó dos Champions, era el Milán de Arrigo Sacchi.Y Ancelotti era el entrenador en el terreno de juego y su discípulo predilecto. Ha sido su número dos en la Selección en aquel Mundial de Estados Unidos 1994 cuando los Azzurri perdieron la final en la tanda de los penaltis contra el Brasil de Bebeto y Romario. De ahí su carrera en los banquillos: Reggiana, Parma, Juventus, Milan, Chelsea, PSG: Champions,  campeonatos en Italia , Inglaterra y Francia, copas y premios varios y variados. Y ahora, el  Real Madrid.

Desde su presentación en el Palco de Honor del Bernabéu ha demostrado que se parece poco al hombre que ha sustituido. La ceja izquierda arqueada denota toda la emoción en la que casi se le escapa una lágrima: algo que dice mucho de él. Es increíble que con su currículum,  con su experiencia y con los retos que ha superado, sea todavía capaz de emocionarse ante un nuevo desafío. Y lo ha demostrado con su discurso en un “itañol” salpicado de acento francés.  Carletto no pierde tiempo, va directamente  al grano: “el club más prestigioso al mundo  tiene que ganar jugando un fútbol espectacular”. Nada más y nada menos. Que tenga pocos puntos en común con su predecesor lo ha demostrado respondiendo a la preguntas de los periodistas en su primera rueda de prensa. Es un tipo con gran personalidad, pero también es simpático, alegre y sonriente. Y salpimienta sus respuestas con  bromas  de todo tipo. Nada nuevo porque como cuenta Paolo Maldini, el mister es capaz antes de una final de Champion Legue de contar chistes y hacer reír a la plantilla mientras que el vestuario rival reina un silencio de tumba.

Ancelotti,  tenía que haber llegado a España en el 2006,  cuando firmó con el Real Madrid un precontrato para tres temporadas, cinco millones de euros al año, pero Adriano Galliani,  el boss del Milán, le dijo que no, que ni hablar, que se quedaba en Milanello. Siete años después el sueño de Florentino Pérez y el deseo de Carletto se cumple. La  prensa lo ha definido como “el Del Bosque italiano”, como el pacificador.  Han dicho que tiene puño de hierro en guante de terciopelo, que es  un entrenador de futbolistas, que no olvida la defensa pero le gusta  jugar al ataque. Pero junto a todas estas definiciones  surge la pregunta de siempre: ¿Triunfará en el Madrid? ¿Triunfará al lado Zinedine Zidane? “el mejor futbolista que he entrenado” ipse dixit.  No hay duda de que Ancelotti  tiene una cultura enciclopédica del fútbol,  es un caballero y un ganador. No hay duda que sepa manejar plantillas abultadas y llenas de egos. Lo ha demostrado en cada sitio donde ha ido,  desde el Milán de Pirlo, Inzaghi, Rui Costa  Shevchenko,  al Chelsea de Torres,Terry, Lampard y Cech al PSG de Ibra, lavezzi y Thiago Silva. No es un secreto que sabe sacar lo mejor de sus futbolistas, sólo hay que ver como jugó Kaká en sus tiempos. No hace falta recordar que sabe lidiar con presidentes y directivos. Hay que ser valientes para tener un “presi” como Silvio Berlusconi o Roman Abramovich. ¿La prensa? No, no será un escándalo cada rueda de prensa como en el caso de Mou. Sí, ésto algunos lo echarán  de menos, Ancelotti no ofrece titulares polémicos cada día. No es su estilo. Es un hombre que ama la vida  y la  calidad de vida  para sí mismo y para sus jugadores, que prefiere la serenidad y la tranquilidad a las polémicas. Es inteligente y no manifiesta preocupaciones y presiones para que el equipo se centre en jugar lo mejor que pueda. En una palabra, tiene toda las calidades para tener éxito. Lo único que necesita es un poco de tiempo. Para que pueda saborear, también en España, su manjar preferido: la Coppa de la grandes orejas.