El Atlético de Madrid consiguió imponerse al Sevilla anoche por uno a tres en el Sánchez Pizjuán. Todos aquellos aficionados que aguantaron el infame horario pudieron ver un partido en el que a intensidad vino por ráfagas y donde se impuso el juego de los colchoneros por efectivo e inteligente.
Empezaba el Sevilla recordándole a los del Manzanares quién jugaba en casa. Los del Cholo jugaron los primeros minutos encerrados en su campo y sin tener apenas posesión. El dominio hispalense fue breve pero bien podría haberles costado el primero a los rojiblancos si el travesaño no hubiese repelido el cabezazo de Bacca en el minuto 20.
Esta acción espoleó al conjunto de Simeone que subió un punto su presión y empezó a llegar a los tres cuartos sevillistas. Koke y Arda empezaban a aparecer con transiciones muy rápidas casi siempre precedidas de una recuperación en el centro del campo. Solo tres minutos después de que vibrase el larguero visitante Villa haría que hiciese lo propio el poste local al rematar contra él una muy buena jugada combinativa entre Juanfran y Costa que acabó con el Guaje solo frente a Beto.
El peligro rondaba el área sevillana y cuando uno juega con fuego se quema. Corría el 34´ cuando Costa remataba a placer, en el segundo palo, un córner que Miranda peinaba en el primero. Jugada muy típica de los del Cholo que esta temporada sigue dándoles resultado. Muy poco duraría el uno a cero en el marcador, concretamente tres minutos, ya que Perotti volvería a meter a los suyos, que estaban realmente tocados, con un zapatazo extraordinario ante el que poco podía hacer Courtois.
Volvería tras esto la lucha al centro del campo donde se imponía el Atlético gracias a un Gabi en su línea que no se vio acompañado en igual medida por un Mario gris. Se iría el partido al descanso así aunque Gabi tuvo el segundo en un tiro desde la frontal que desvió lo justo Fazio.
Con la reanudación volvió la tónica del principio del primer acto: el Sevilla dominaba sin crear peligro claro. Vitolo dispuso de la mejor ocasión sevillista al quedarse solo frente a Courtois. Finalmente el balón se iba al lateral de la red y el con él se esfumaban las opciones locales: el Atlético volvía a encender la máquina. Esta vez lo colchoneros esperaban agazapados. Ya con Villa en el banquillo y Oliver disfrutando de minutos el equipo hizo su partido. Diego Costa con su intensidad desquició tanto a la defensa como a la grada que lo tenían como objetivo desde antes del comienzo del partido. Sale muy caro enfadar una pantera y prueba de ello fue el segundo gol del brasileño. Gabi volvía a recuperar en el centro del campo y se la daba Koke que veía a Costa haciendo un desmarque que a muchos recordó a la final de Copa. Se escoraba Diego y cruzaba el balón imposible para Beto.
El Sevilla bajó los brazos y el peligro seguía siendo colchonero a la contra. En uno de dichos contraataques vendría la sentencia. El Cebolla Rodríguez metía la sexta por la banda derecha marchándose como una bala hacia el interior del área. Engañaba a Israel Puerto, amagando con el pase a Costa, y se plantaba solo ante Beto que sufriría la misma treta dejando que el balón se colase por el primer palo.
El Atlético se llevó con suficiencia los tres puntos y empieza de una forma inmejorable la Liga, lo que le permite centrarse en la ida de la Supercopa, que tendrá lugar este miércoles ante el Barcelona.
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