19 jornadas han trascurrido ya en el grupo IX. 19 domingos en los que los conjuntos de la provincia han luchado contra gigantes malagueños y compactos equipos granadinos y almerienses. De momento, el Linares Deportivo y el Martos CD cerrarán el año en play off pese a que el Atlético Mancha Real también ha coqueteado con el liderato durante semanas. Aún así, la plantilla de Fernando Campos unida al Villacarrillo CF lucharán por estar en liguilla a final de temporada. Por abajo, Los Villares CF dice adiós al 2013 en puestos descenso pero con la permanencia no muy lejos. En Palabra de Fútbol, la Tercera División ocupa un lugar especial y hemos querido analizar estos primeros cuatro meses de competición y ver las perspectivas del resto de campaña de los cinco jiennenses en liza.
Linares Deportivo: esperanzadora tercera plaza
El equipo azulillo despide el 2013 en una posición óptima. Los pupilos de Torres ocupan la tercera plaza con 42 puntos, a sólo dos del líder y a seis del quinto puesto. Por tanto, los linarenses abrirán el nuevo año con una sonrisa. La nave minera ha navegado a toda vela en los últimos dos meses y medio de competición. Diez jornadas consecutivas sin perder, con siete triunfos y tres empates, números casi inmejorables. El Linares Deportivo ya no es ese equipo algo dubitativo de la temporada pasada, cuya irregularidad le llevó a quedarse sin el premio de la liguilla. Los azulillos se están mostrando este año como un equipo prácticamente imbatible en Linarejos (sólo el Marbella les ha derrotado, el resto de partidos, ocho, los cuenta por victorias) y muy serio en sus desplazamientos. Mucho tiene que ver en ello el excelente rendimiento de una de las apuestas de la dirección deportiva, su delantero Rafa Payán. El atacante granadino se está erigiendo en el principal bastión ofensivo, que anota goles y asiste a sus acompañantes. Sus 11 tantos hasta la fecha le colocan como el segundo máximo goleador del grupo IX. Otro buen porcentaje de culpa de la dinámica positiva de los azulillos está en la portería. La llegada y asentamiento bajo palos de una enorme promesa como Lopito es otra de las alegrías de la primera vuelta. El joven cancerbero está cumpliendo con creces en la meta linarense y ha salvado muchos puntos con sus intervenciones mientras sigue aprendiendo de su compañero y capitán Óscar Benito.
Por lo demás, Chico, Luque, Óscar Ventaja o Higinio ponen su veteranía y calidad al servicio del grupo y se mezclan con la ilusión y las ganas de jóvenes pujantes como Corpas, Rubio, Fran Carles o Silva, juvenil que ha sorprendido por su clase y espontaneidad. Esa combinación de experiencia y bisoñez ha cuajado en una plantilla con muchos recursos. La nota negativa para el equipo de Torres han sido las lesiones. Vitu, Fran, Rubio o Fran Carles han visto mermados por diversas dolencias. Pero los peor parados son Ángel y David Rus. Ambos canteranos se han despedido de la temporada por lesiones graves de rodilla, aunque el club ha tenido el detalle de renovarles automáticamente. Precisamente la baja de Ángel ha provocado el fichaje de Brazalez para ocupar su hueco en la delantera linarense. Su adaptación al esquema será importante para un grupo que afronta la segunda vuelta con la vista puesta en asegurarse la liguilla y por qué no, luchar por el liderato del grupo.
Martos CD: seguir trabajando para alcanzar el anhelo de la liguilla
Verles en la zona alta de la tabla ya no es novedad. El conjunto marteño, cuarto con 37 puntos, es el segundo mejor equipo jiennense hasta el momento y durante varias jornadas encabezó la clasificación. Pese a ello, el equipo empezó con dudas tras sumar dos derrotas en las tres primeras jornadas. Pero las disipó de forma contundente. Los pupilos de Juan Arsenal, en un arranque histórico, sumaron siete triunfos seguidos y diez semanas sin conocer la derrota a partir de la jornada 4. Esos brillantes números le permitieron alzarse con liderato. Parecían imparables. Miguel Díaz apenas encajaba goles y en ataque, todos aportaban. En esos momentos de bonanza, apareció la sensatez de su míster, Juan Arsenal, para poner los pies en la tierra y apostar por el trabajo como receta para mantener un estatus privilegiado. El Atlético Malagueño rompió la excepcional racha y el mazazo se alargó con la derrota ante el colista, Unión Estepona, en sendos encuentros lejos del Municipal marteño. Esos dos pinchazos frenaron su progresión pero el equipo ha sabido rehacerse. En el último mes ha sumado dos triunfos en su estadio y dos empates fuera de casa, que aunque sepan a poco, como el de San Pedro, sirven para no perder comba en los puestos de liguilla. Esa provisional posición es fruto de las rotaciones de una plantilla en la que todos suman. La llegada del experimentado Domingo, con la temporada ya iniciada, supuso un refuerzo clave para la zaga y la zona del pivote defensivo. Su fichaje unido a la adaptación del resto de caras nuevas como Chikini, Horno o Ayala y al buen rendimiento de los pilares de la temporada pasada como Carles o el propio Miguel Díaz, acoplan un plantel con grandes nombres y grandes hombres. La guinda puede representarla el fichaje de Carrillo, el goleador marteño que ha firmado en busca de los minutos que no dispuso en Segunda B con el Lucena. A principios de temporada disputar los play off se veía como un sueño lejano. Con el paso de las semanas y de las jornadas, ese anhelo se ve más cerca. Villacarrillo, Vélez, Mancha Real o Loja parecen los rivales directos en pos de ese jugoso objetivo. Queda mucha tela por cortar en la segunda vuelta, pero a buen seguro que el Martos estará ahí. Mimbres posee, afición también.
Villacarrillo CF: encontrar la regularidad como primer objetivo
Se avecinaba una temporada diferente en el Veracruz. La marcha de hombres importantes como Salva, Antoñín, Montiel, Ortega o Juan Ángel invitaba a pensar que la hazaña de la campaña pasada, rozando el play off, no podría repetirse. Aún así, el regreso de Elady, los fichajes de jóvenes pujantes como Jorge, Álvaro Lozano o Javi Cañada entre otros y la aparición fulgurante de jugadores como Calderón o Linares permiten ilusionarse. Transcurrida la primera vuelta, el conjunto celeste mantiene sus opciones. Es cierto que los de Alberto Lasarte han pecado de irregularidad en este primer tramo de temporada. Sobre todo fuera de casa. Lejos de Villacarrillo les cuesta y buena prueba de ello es que su primera victoria como visitantes tardó en llegar casi tres meses. En cambio, el Veracruz se mantiene inexpugnable. El coliseo villacarrillense es el único estadio el grupo IX donde todavía nadie ha sido capaz de llevarse el triunfo. Cuando juega en casa, de momento, el Villacarrillo siempre suma. Por tanto, el objetivo celeste es encontrar la regularidad entre sus resultados como local y como visitante. Ese equilibrio sería el pasaporte hacia la deseada cuarta plaza que por ahora se encuentra a 4 puntos. En beneficio de ello, también será clave la recuperación de sus lesionados. En estos primeros cuatro meses de competición, la enfermería celeste ha estado repleta. Maykel, Cuevas, Javi Cañada o Lozano han estado entre algodones mucho tiempo. La sanción de cuatro partidos de Elady, su máximo goleador, también fue perjudicial. Tanto, que la corta plantilla de Alberto Lasarte, obligó al técnico jienense a dar la alternativa a dos juveniles, Andrés Pajarito y Raúl Paco.
Pese a las continuas bajas, el Villacarrillo ha asentado su columna vertebral con Rubio, Niza, Rodri, Toni y Román, que poco a poco está viendo puerta. Apoyados en su bloque, realzaron el vuelo a finales de noviembre y en diciembre para tener relativamente cerca los puestos de liguilla. Su séptimo lugar momentáneo no es suficiente para una afición que ya se ha acostumbrado a coquetear con la zona de privilegio. Colmar esos deseos dependerá en buena parte del rendimiento del equipo en el mes de enero en el que se enfrenta a conjuntos de mitad de tabla. Esos duelos servirán de vara de medir para los villacarrillenses de cara a encontrar la regularidad en los enfrentamientos consecutivos contra rivales directos de los meses de febrero y marzo.
Atlético Mancha Real: realzar el vuelo tras un diciembre negro
El conjunto mancharrealeño está protagonizando un año de vaivenes. Inició el curso con dos tropiezos pero una vez cogió el ritmo de victorias llegó a ocupar el coliderato del grupo IX. Esa situación ha dado un vuelco en diciembre. El mes de la Navidad y de la lotería no ha traído nada positivo a los verdes que han sumado cuatro derrotas consecutivas ante contrincantes de su nivel (Linares, Marbella, Loja y Villacarrillo). Esos resultados les han empujado a la octava posición con la que despiden el año y que sabe a poco si observamos su recorrido en los meses anteriores. De momento, no todo está perdido. Los mancharrealeños suman 32 puntos, a cinco del play off y cuentan con una nómina de jugadores experimentados y un técnico capaz de gestionar esta dinámica negativa. El parón navideño vendrá bien para recargar las pilas y reconducir el camino. No está siendo fácil la temporada para el Mancha Real. Las numerosas lesiones y sanciones, entre ellas dos de cuatro partidos a Ocaña y Vacas por la trifulca ante el Estepona, han lastrado a un plantel corto que necesitó del refuerzo de Oya. Las ausencias provocaron que en varias ocasiones viajaran a los partidos con lo justo. A destacar es que en estos instantes de extrema dificultad, el equipo respondió de forma excelente. Varios de los mejores momentos del equipo se vivieron con la plaga de bajas que asoló a los manchegos en los primeros dos meses. Siete victorias en ocho encuentros. Lo paradójico, por el contrario, es que conforme la enfermería, donde siguen Serrano, Juanlu y Santi López, se ha ido vaciando y los sancionados han cumplido su castigo, la escuadra verde se ha encontrado con las derrotas.
A buen seguro que en los próximos compromisos, el Mancha Real se reencontrará con su mejor cara. Para lograrlo necesita de los goles de Carlos Ortega, de la buena forma de Albertillo y de la fortaleza defensiva que erigió a Emilio en un muro en el primer tramo de temporada. Sin ir más lejos, a la vuelta de estas ‘mini’ vacaciones, el Mancha Real se verá las caras con Martos y Atlético Malagueño que pueden ser dos balones de oxígeno para reedificar su candidatura a la liguilla y realzar el vuelo tras un diciembre negro.
Los Villares CF: el sueño de la permanencia es posible
El conjunto villariego cierra un 2013 histórico en el que logró por primera vez el ascenso a Tercera División. Durante su primera vuelta en la cuarta categoría del fútbol español, Los Villares CF ha pagado un poco la novatada dejando escapar algunos puntos importantes. Tras 19 jornadas, los rojiverdes ocupan la antepenúltima posición. Aún así, no todo pinta tan mal para los pupilos de Rafa Ruano. Suman 13 puntos, es decir, están situados a dos de la salvación que actualmente marca el CD Ronda con 15 puntos. Y además, no vislumbran muy lejos a la UD San Pedro a sólo tres puntos y Los Molinos a cuatro. Por tanto, queda camino por recorrer de cara a la obtención de la permanencia. Esta semana, la retirada de competición del Unión Estepona ha aclarado un poco más el panorama dejando sólo ya dos plazas de descenso por completar. El objetivo no es otro que evitar esa quema. Para ello, el plantel villariego ha de seguir trabajando tras alcanzar el ecuador liguero. El acierto de cara a gol es una de sus asignaturas pendientes y, a buen seguro que si aumentan su puntería, los puntos irán cayendo. Para ello, Grego, Samu o Mario tendrán que multiplicar sus guarismos de la primera vuelta. Hacerse fuertes en el José Antonio Manrique, otrora inexpugnable y aún hoy complicado feudo, será otra de las claves. De cara a 2014, tienen que darle la vuelta a la negativa dinámica con la que le dicen adiós a 2013. Seis derrotas consecutivas, algunas merecidas, otras no tanto, ante cinco de los seis primeros clasificados y el Español del Alquián, en el puerto de montaña particular que Los Villares ha afrontado en las últimas seis semanas.
La vuelta a los terrenos de juego no será fácil ante otro coco como es el Martos CD, pero servirá de piedra de toque para los importantes compromisos de finales de enero y principios de febrero. En apenas un mes, Los Villares se jugará gran parte de sus aspiraciones de mantenerse recibiendo en casa a San Pedro y Melilla B y visitando los estadios de Huércal y Los Molinos, rivales directos. Recolectar puntos en esas fechas servirá de acicate para alimentar las ilusiones de una afición que cree que el sueño de la permanencia es posible.
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