Rodrigo de la Torre.- El militante de Olympiacos Pireaus es sin duda, si no el más, uno de los que más acobarda al oponente. El juego de Spanoulis es curioso, en la gran mayoría de los encuentros dedica los dos primeros cuartos a medir el tempo del partido. Deja ver siempre sus asistencias; pero no suele ser hasta el tercer tiempo el momento en que sus puntos caen como la avalancha de nieve de una montaña. Pocas veces son las que llega al descanso con más de 6 u 8 puntos. Es a la vuelta de los 5 minutos, para coger aire, cuando empieza el festival de anotación de este hombre, dejando así KO al equipo rival. Véanse los 28 puntos contra Fenerbahce y los 24 ante el Bayern Munich.
Vassilis ha conseguido tres Euroligas en su carrera; dos han sido consecutivas con el conjunto rojiblanco; en ambas MVP de la Final Four; en las dos últimas temporadas siendo crucial para su equipo y otra en el eterno rival de su equipo actual, el Panhatinaikos BC, en la temporada 2008-2009.
Y la gran noticia llegó este verano al decirle “no” al Barcelona y renovando tres años más con Olympiacos. Y por lo que parece no ha sido una mala decisión, el Olympiacos ha sido el único equipo junto al Real Madrid en ganar los 10 partidos de la fase de grupos, en los que ha sido un claro líder para su equipo promediando 15.8 puntos y 4.8 asistencias.
Spanoulis pasó por la NBA en una efímera temporada en los Houston Rockets, en la que solo jugó 32 encuentros de los 82 que forman la liga regular. Al parecer Houston se equivocó en dejarle jugar tan poco y en la temporada 2007-2008 volvería a Europa.
En su selección ha sido, junto a Bourousis y Shorchanitis, la pieza clave del conjunto griego, consiguiendo así el oro en el Europeo de Serbia en 2005 y la plata en el Mundial de Japón en 2006, en aquella final que perderían contra España.
Llegando a una conclusión final se puede decir que Vassilis Spanoulis es el jugador que todo entrenador querría en su plantilla. Un líder innato que quiere conseguir la tercera Euroliga seguida esta temporada.
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