Real Madrid 4-2 Villarreal. En el Real Madrid si hay una cosa clara es que hay pocas posiciones en las que si falta el titular la grada lo eche de menos, incluso cuando falta Cristiano Ronaldo. Hoy era el turno de Bale después de varias jornadas ausente el galés volvió a lo grande haciendo una muy buena primera parte como si no hubiese faltado a ningún partido. Él y Jesé fueron los encargados de galopar las bandas del Bernabéu. Enfrente un equipo que sabe jugar muy bien al fútbol como el Villarreal, basado en el juego de toque y que sea cual sea el rival jamás cambia la forma de juego.
Bale quiso dejar claro desde el principio que no sufre ningún tipo de problemas y que estaba más que preparado para encarar un partido, lo demostró en los primeros minutos donde robó la cartera a la defensa del Villarreal y se plantó solo delante de Asenjo definiendo a la perfección, picándola y enviando el balón al segundo palo. Había vuelto, de nuevo se volvía a dibujar un corazón con sus manos y el Bernabéu se levantaba para aplaudir la vuelta del galés. Los blancos jugaron con intensidad, robando balones en el centro del campo e intentado anular a un Villarreal que se veía muy presionado. Hacia el minuto 25 Bale volvió a aparecer rompiendo la banda derecha hasta llegar a línea de fondo y asistiendo a Benzema que solo tuvo que empujar para poner el 2-0 en el marcador.
Con esta ventaja el Madrid se fue relajando y eso lo aprovechó el Villarreal que fue ganando más terreno en el campo y elaborando mucho más su juego. Los blancos llevaban el peligro arriba de las botas de Jesé que lo intentó de todas las maneras pero no gozó de una ocasión clara. Al filo del descanso Mario recibió el balón en la frontal del área madridista y con su empeine derecho perforó las redes de Diego López, frenando así la racha de imbatibilidad en el Santiago Bernabéu. Un golazo de los que no salen todos los días y que sirvió al Villarreal para recortar distancias y creer en la remontada.
El inicio de la segunda parte empezó frio por ambos equipos, mucho juego en el centro del campo pero poco acercamiento a ambas áreas. Algo le faltaba al día, la presencia y la huella de alguien, Jesé, este chico aparece en todos los partidos y este no iba a ser una excepción. El canario recibió un gran pase de Di María que lo plantó en el área y con su velocidad y mejor definición, toco sutil con su pie derecho, puso el 3-1 en el marcador. La promesa hace mucho tiempo que dejó paso a la realidad con este chico que está haciendo una temporada espectacular.
Apenas sin tiempo para celebrar el tercer gol madridista llegó el segundo del Villarreal. Falta al borde del área que ejecutó a la perfección Giovanni, la pegó con la izquierda dando la roca suficiente para ponerla lejos del alcance de Diego López. Los aficionados del Villarreal entonaron el “Sí se puede” para motivar a los suyos. La sala de máquinas del Madrid pronto calló esos gritos haciendo una contra de manual, perfecta que culminó con un disparo de Benzema en la frontal del área, rasito y ajustado al palo donde nada pudo hacer Asenjo. El Bernabéu era una fiesta y se volvió loco ante la nueva exhibición de Luka Modric que goza de un estado de forma espectacular.
El Real Madrid volvió a ganar y jugar bien frente a un Villarreal que dio la cara en el terreno de juego.
Follow
