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El gran despropósito del Tata

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tataEduardo Lucas Bueso.- El entrenador del Barça ha sorprendido a propios y extraños con su última alineación. Lo de Valencia se puede considerar un accidente, pero lo de Anoeta es un error, un inmenso error, que si  lo analizamos un poco, resulta casi esperpéntico. Tras el varapalo del Valencia, el equipo se recuperó de forma fulminante y tras el partido de Manchester y el de Anoeta en la copa, con un control absoluto del juego, se puede afirmar que hizo los mejores minutos de la temporada, con una alineación tan predecible como eficaz.  Pues bien, como las cosas funcionaron así de requetebien, al Tata que acababa de comentar en ruedas de prensa que la liga se decidiría por pequeños errores, sólo se le ocurrió hacer seís cambios en un campo de los más difíciles de nuestra liga. Esto lo vuelve a repetir en lo que queda de competición y un presidente coherente lo pone  en la calle aunque le asegure la ChampiónS.

Este ataque de originalitis que le indujo a semejante disparate le va a costar la liga, si Dios el Mesias no multiplica sus milagros. Este desatino me recuerda en todo a uno que tuvo Guardiola en la única liga que perdió en su brillantísima etapa de entrenador del primer equipo, fue concretamente en Pamplona, donde tuvo la “feliz idea” de dejarse fuera del equipo a los cinco centrocampistas titulares: Busquet, Xavi, Iniesta, Fabregas y Touré que estaba en la copa de Africa, el resultado fue el mismo de ahora en Anoeta y la consecuencia, el inicio del declive que le costó el campeonato.  Parece que el Tata entendió mejor el equipo al principio y conforme avanza el tiempo, incrementa sus errores, algo así como Mou que al tercer año de dirigir al equipo con la plantilla más cara de la historia del Real Madrid, los dejó sin títulos y con secuelas personales que crisparon a gran parte de la plantilla.

  El problema final del Barça es que, aunque el Tata ceda a la lógica y a la presión de los medios, la desmoralización y la desconfianza harán mella en jugadores que, siendo unos profesionales del mayor nivel de calidad en el mundo como han demostrado hasta ahora, difícilmente superarán este desaguisado.