Álvaro Ferrero.- Manolo Herrero hacía posiblemente su última entrada en la sala de prensa de La Victoria con una palpable desolación. El técnico iliturgitano manifestó que su equipo no hizo méritos para sufrir tantos varapalos durante las últimas jornadas: “Hemos tenido una serie de partidos en los que el fútbol ha sido muy cruel con nosotros, y hoy ha sido el colmo. No hemos merecido perder, pero hemos tenido ocasiones al contraataque que no hemos materializado y atrás nos ha faltado firmeza”.
El preparador jiennense cree que el descenso del Real Jaén no es justo, porque “no hemos hecho fútbol para descender, pero los errores defensivos en momentos puntuales y la falta de gol durante muchas jornadas nos han condenado”.
Herrero dijo que los jugadores están hundidos y que “no hay palabras de consuelo, porque nos había costado muchísimo llegar hasta aquí y nos ha durado un año”. Aún así, sabe que no hay vuelta atrás y solo queda mirar al horizonte para salir de este duro mazazo: “Hay que levantarse. Mañana amanece de nuevo y hay que seguir hacia adelante. No puedo reprochar nada a los jugadores”.
Cuestionado acerca del cambio de Jona a quince minutos para el final y con 1-0 en el marcador, el técnico jiennense fue claro: “El problema es que Jona ha pedido el cambio. No teníamos delanteros, y he decidido meter a Nino porque el Alavés estaba creando mucho peligro en el juego aéreo y tenía jugadores muy peligrosos como Ion Vélez o Quiroga.”.
Herrero no quiso comentar nada acerca de su futuro, pero parece claro que no continuará como entrenador del Real Jaén la próxima temporada. “Sea cual sea, la decisión la tomé hace tiempo. Ahora mismo mi futuro es secundario, lo importante es que estamos muy dolidos por lo sucedido”, finalizó su comparecencia el técnico iliturgitano.
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