Inicio 1ª División Torres: «Ascender no es una obsesión, es nuestra meta»

Torres: «Ascender no es una obsesión, es nuestra meta»

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Sara Osorno.-Linares. Antonio José García Múñoz, «Torres», entrenador del Linares, nos recibió sobre el terreno de juego del Estadio de Linarejos. Joven y un poco tímido, el técnico nos abrió el espacio deportivo pero también el terreno personal. Todavía, escuchando a Torres, se podían oir los ecos de la última tarde de fútbol, la tarde que cerraba una larga temporada y que no trajo el premio del ascenso.

¿Resulta difícil definir una temporada como la anterior?

 Más bien difícil de repetir. Creo que ha sido una temporada casi de diez en la que solo nos ha faltado el ascenso en el último partido. Las temporadas, como casi todo, se acaban definiendo por la consecución o no de los objetivos. En nuestro caso creo que el trabajo y la entrega merecen la calificación máxima pese a no haber ascendido

 ¿Mirando atrás que faltó, además del gol. ¿Qué cree que pudo faltar para conseguir ese ansiado ascenso?

Pienso que se puede pedir poco más, hemos trabajado al 120% .Conseguimos eliminar a dos equipos superiores pero perdimos contra uno muy parejo, eso sumado a la anulación de un gol decisivo, sea quizás la parte más negativa. Siempre hay que contar con la suerte pero creo que lo hicimos todo para merecer el premio. Eso sí, nos faltó culminar.

 Si además de no ascender tuviera que ponerle un “pero” a la temporada pasada, ¿cuál sería?

 Las tres derrotas en los primeros partidos, aunque luego nos dieron mucha fuerza para luchar y no perder en veinticinco partidos. En el fútbol, muchas veces, a lo que parece un contratiempo, si eres inteligente, puedes sacarle rendimiento. Perder es una oportunidad también y de aquellas derrotas obtuvimos una cohesión, una mentalización y, si quieres, una rabia que nos permitió encadenar triunfos, conseguir muchos puntos y elevar nuestra autoestima. Muchas cosas buenas de una mala.

Siguiendo con el pasado. ¿Cómo encajaron el golpe de no ascender los jugadores?

 Lo han manejado bien, lo encajaron como un aprendizaje, aunque hubieran preferido no aprenderlo y ascender, está claro. Además, la mezcla entre juventud y veteranía ha hecho que los más jóvenes como Carles, Corpas o Jonathan Rosales hayan soportado bien la presión dentro y fuera del campo, yo mismo me sorprendí al verlos jugar con tanto desparpajo. Los que estamos metidos en esto debemos saber convivir con todo, con los triunfos y, lo más complicado, con la derrota. Fue un golpe muy duro y solo la madurez del grupo nos hará salir con las posibilidades intactas y aspirar desde el primer momento a competir al máximo y aspirar a que esta temporada sea la del ascenso.

 ¿El equipo que pensaba para la próxima temporada, se parece al que están haciendo?

 Si. A parte de conservar la base de los jugadores de la temporada pasada, hay algunos que a mí, como entrenador, me gustan, como David Gámiz. Quizás nos falta alguna cosa que a veces por presupuesto se escapa. En este momento creo que la plantilla está hecha a falta de un lateral quizás un sb-23 que si podemos queremos incorporar. Por lo demás el bloque está hecho y creo que, para la categoría, tenemos un equipo capaz de cumplir con el objetivo marcado.

 ¿Tiene alguna esperanza de ganar todavía la plaza en Segunda B?

 Yo me desenvuelvo mejor en el campo, en el banquillo. Los despachos no son mi fuerte. Creo que se ha hecho lo que se debía, tratar de que esa plaza sea para el Linares. Lo demás es otra cosa. Ahí entran intereses y normativas que yo no acabo de entender. Si te digo la verdad, lo veo complicado. Deportivamente estoy convencido de que esa plaza debiera ser para nosotros. Sin embargo ya estamos viendo por dónde van las cosas. Es mejor no distraerse, trabajar y preparar nuestros objetivos con la misma fuerza y con la misma ilusión que lo hemos hechos en otras temporadas. Si luego tenemos un premio, mejor.

 ¿Cómo se encontraba el Torres que escribía esa nota en twitter agradeciendo emotivamente el apoyo a la afición y jugadores y como se siente ahora?

 Es como una herida que se va cerrando, el Linares es el club que llevo dentro y me va a costar más, pero ya estoy muy animado y con ganas de que llegue el primer entrenamiento. Fue una tarde dura. Había muchas ilusiones puestas en ese partido. Era un sueño pero, ya lo he dicho, el fútbol es así. Tiene cosas que te hacen inmensamente feliz y otras que te rompen. Aquella tarde estaba roto.

 ¿Es Torres un entrenador que se preocupa también de la vida privada de sus jugadores?

El vestuario es lo más parecido a una familia. Procuro saber como se encuentran y que se sientan lo mas cómodos posible y lógicamente también exijo que se cuiden y que den lo mejor en los entrenos de cara a que el domingo rindan. Anquela una vez me dijo “de la manera que se entrena se juega el domingo”. Eso es así, sabemos a lo que nos dedicamos y debemos estar siempre en la mejor forma posible para responder.

 ¿Cree que la gente sabe valorar el esfuerzo que supone mantener una temporada a ese nivel?

La gran mayoría sí, y es de agradecer, siempre hay un mínimo de personas que reprochan o extienden rumores porque no entienden lo duro de llegar a una final, pero en general la gente está orgullosa del equipo. El fútbol es un deporte del que todo el mundo «entiende» y es normal que hay tantas opiniones como personas pero, en general, creo que se entiende y se valora lo que cuesta trabajar todo el año con la tensión y la obligación de lograr un ascenso. Es Muy duro en ocasiones.

¿Ha pensado en algún momento en no seguir?

 Hay momentos en los que te lo planteas pero cuando ves que en realidad la cosa va bien y que los propios jugadores te preguntan si vas a seguir o no para firmar su continuidad, te llenas de fuerza. Hay muchos factores que juegan a la hora de tomar una decisión tan delicada. Por una parte el hecho de llevar mucho tiempo en el puesto podría ser una razón para plantearse no seguir, por otra qué razón hay para irse si aquí han dado muestras de desear mi continuidad. La directiva lo hubiera tenido fácil de no estar convencida. Yo sé que este es mi club y en Linares tengo mi casa. Si, además, cuento con el apoyo de los que dirigen esto pues debos volver a intentarlo.

 ¿Le obsesiona el reto del ascenso?

 Obsesionarme no, me gustaría disfrutarlo porque ya lo hemos probado antes y se lo que se siente al ver la cara de satisfacción de los jugadores y la afición. Pero no me gusta mirar a la meta antes de hora porque si miras demasiado lejos, te puedes tropezar con la piedra que tienes delante. Cre que más que una obsesión, es nuestra meta.

El Pensamiento de Torres:

Nuestra pasada temporada fue casi de diez

Si hubiera justicia deportiva la plaza de Segunda B, seria nuestra

El ascenso no es una obsesión, es una meta

La madurez de la plantilla nos hace ser optimistas, no hay traumas

Había alguna razón para irme y muchas razones para quedarme y aquí estoy, feliz.