Real Madrid 2-0 Sevilla FC. El Real Madrid se ha proclamado campeón de la Supercopa de Europa gracias a dos goles de Cristiano Ronaldo. A pesar de seguir en pretemporada ambos equipos han mostrado una gran intensidad en el partido pero el Sevilla poco pudo hacer para retener a los futbolistas blancos. Cristiano volvió a mostrar su mejor nivel tras haber superado las molestias que arrastraba desde el final de la temporada pasada. James y Kroos debutaron con una magnífica exhibición del alemán y algo más discreto el colombiano que se tuvo que retirar por sobrecarga.
Tras una ceremonia inaugural espectacular empezó a rodar el balón en el Cardiff City Stadium. Ambos equipos empezaron fríos o sin ganas de hacer daño al rival, a la espera de encontrar sus errores para asaltar la portería. Fazio fue el gran protagonista del Sevilla en la primera mitad, allí dónde olía a peligro estaba él para arreglarlo. Con el paso de los minutos Kroos fue ganando protagonismo y adueñándose del centro del campo, haciendo bailar al Madrid al ritmo de sus botas. James se mostraba participativo pero demasiado precipitado, tenía muchas ganas de demostrar y eso le provocó ansiedad. Los que nunca bajan el ritmo son Bale y Cristiano Ronaldo, el galés hizo despliegue de su gran momento de forma tirando de su mejor recurso, la velocidad. En cambio Cristiano estuvo paciente, esperando hasta el momento oportuno para asestar el primer golpe.
A la media hora de partido Bale centraba desde la banda izquierda, un balón teledirigido a Cristiano Ronaldo que se plantó en el segundo palo para rematar. Fernando Navarro se vio superado y Beto perplejo sin saber qué hacer. Jugada de libro como dirían los románticos, esas jugadas que viendo la plantilla del Madrid hacen soñar a la afición madridista. El Sevilla apenas pegaba pequeñas punzadas, Vitolo hacía lo que podía pero el equipo estaba más preocupado en no encajar que en hacer gol.
Al comenzar la segunda parte Cristiano sumió las esperanzas sevillistas en la red de Beto. Golpeo con la zurda y vuelta a la mejor versión del portugués, sus compañeros le vieron, le buscaron y el madridismo volvió a sonreír. La superioridad era clara y el talento enorme, el Sevilla demostró ser un gran equipo pero de este mundo. Denis Suarez se echó el peso del equipo a la espalda pero no fue suficiente para incomodar al Madrid.
Los finales siempre tienen dos caras, esta vez la feliz se la llevó el Madrid y las lágrimas en los ojos de Alberto Moreno que se despidió de su afición con rumbo a Liverpool. Casillas levantó la segunda Supercopa de Europa y ahora se fija ganar la de España, tendremos que esperar una semana más.
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