Javier Imbroda. – Desazón. La derrota del Málaga C.F. frente al Español, no fue una derrota cualquiera. Fue una derrota que empezó en el partido anterior, que continuó con la marejada en los despachos tras la demanda al Jeque por apropiación indebida de acciones del club (algo que evidentemente habrá que probar, y más en estos tiempos que corren, tan aficionados a imputar a todo el que se mueva), y que finalizó con las declaraciones previas al partido por parte de su entrenador, que hablaba de la permanencia a pesar de ir séptimo. Unas declaraciones que exceden a la prudencia. Unos hechos que fueron la antesala de una dolorosa derrota. Un equipo es material sensible, cualquier distracción, movimiento inesperado, ocurra en los despachos o no, puede alterar el equilibrio emocional del grupo. Si le pasa a un Madrid, la tormenta acaba al siguiente partido, si le pasa a un modesto como al Málaga, se puede prolongar el malestar. Un modesto necesita la máxima tranquilidad para optimizar sus recursos. Habrá que ver cómo gestionan esta situación.
– La mano negra (II). Aunque sea un tema que nos pilla lejos, no andaba muy desencaminado cuando hablaba de lo cansino que resulta escuchar el victimismo permanente que nos llega desde Barcelona a colación con el caso Neymar, u otras cuestiones sociales o políticas. Que si Madrid, que si el Estado, que si no los quieren, que si una mano negra, que si… En fin, siempre hay algo. Y cuando desembarca el actual Presidente del Barça en Madrid a declarar ante el juez Ruz sobre el caso, nos encontramos con que la mano negra, es Rossell, el anterior Presidente del club, es el señalado. Es decir, en Barcelona, la culpa la tiene Madrid, el Estado o no sé quién, y en Madrid, la tiene Rossell. Cuando la deslealtad comienza por tierras catalanas, y culmina con la traición en la capital. Todo muy edificante.
– Copa del Rey. Unicaja afronta su participación en la próxima Copa del Rey desde lo más alto. Sufriendo en la Liga europea, y dominando en la liga española. Tiene suficientes credenciales para presentarse con aspiraciones reales a esa tan siempre apasionante competición. Hablar de favoritos en esta competición es hacer un brindis al sol. Casi nunca se acierta. Una competición al mejor en cuatro días. Baloncesto en estado puro. Y Unicaja a hacer valer la gran temporada que está desarrollando. La Copa del Rey, es uno de esos puntos de inflexión que concurren a lo largo de una temporada. Unicaja ha entrado por la puerta grande a esa Copa, ojalá salga igual.
– Gasol vs Gasol. Cuando estas líneas vean la luz, se habrá producido ese salto inicial para la historia. Ese salto que abrirá portadas de todos los medios de comunicación. Lo que han hecho estos hermanos, estos deportistas, ya está en los anales de la historia del deporte. Algo impresionante, irrepetible.
– Juan Godoy. Presidente y alma mater de El Palo. Llevó y mantiene con muchos esfuerzos y sacrificios a un equipo de barrio a unos lugares competitivos desconocidos. El apoyo que Juan encuentra en el gran Fendi, el otro alma de este proyecto, hacen que admiremos este recorrido. No es nada fácil lo que están haciendo con tan pocos recursos, pero no hay duda que esa hazaña deportiva que están viviendo, será recordada siempre.
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