El Barcelona acabó ganando un partido que se le puso cuesta arriba en la primera mitad cuando a los 22 minutos Papadopoulos adelantó a los suyos. Los locales lo intentaron durante todo el partido, pero la gran muralla defensiva montada por los dirigidos por Schmidt impidió que las ocasiones elaboradas por Neymar, Suárez, Sandro y compañía lograran conseguir el empate. Los últimos diez minutos fueron la clave, Sergi Roberto y Luis Suárez dieron la vuelta al marcador en dos minutos.
La ya conocida baja de Messi era el primer gol que encajaron los de Luis Enrique y los alemanes se dieron cuenta. El argentino no solo supone un peligro constante para los rivales, sino que contagia a los suyos con su ADN ganador y hace que todo parezca mas fácil. Aprovechó eso el Leverkusen, salió apretando desde el primer minuto muy arriba y creando ocasiones de claro peligro ante la portería de Ter Stegen. Bellarabi fue un quebradero de cabeza para Mathieu, incómodo una vez más en el lateral izquierdo, durante toda la primera mitad y fue precisamente un centro suyo que acabó en córner lo que daría el tanto a los suyos. A los 20 minutos pasados de juego, el córner botado por los alemanes acababa con el 0-1 de Papadopoulos en un error por falta de entendimiento entre Ter Stegen y Luis Suárez, que cubría el primer palo.
Iniesta fue quien trato de echarse su equipo a la espalda para lograr dar la vuelta al resultado, pero el Barça no estaba acertado de cara a portería. Poco antes del descanso, Neymar estrellaba un balón al póster cuyo posterior rechace caía a los pies de Sandro que remató pero salvó la defensa germana bajo palos.
En la segunda parte seguía intentándolo el Barcelona y el Leverkusen trataba de defender con uñas y dientes su ventaja, pero los azulgrana cada vez volcaban más su juego hacía la portería rival y parecía cuestión de minutos que llegase el empate. La desventaja en el marcador no sería lo único que preocupaba en los siguientes minutos a Luis Enrique, puesto que Iniesta se tuvo que retirar del terreno de juego lesionado, Jordi Alba ocupó su lugar. La entrada del lateral fue el revulsivo que tal vez necesitaba el equipo, puesto que con su desborde logró romper las líneas de una fatigada defensa.
Con un centro suyo llegaría el empate. A los 79 minutos, el Barça hilaba una gran jugada que acababa con un centro al área pequeña del lateral que remataba Munir. El balón quedó muerto tras la parada de Leno y Sergi Roberto sólo tuvo que empujarla a gol casi en la línea. Prácticamente un par de minutos después, en la siguiente jugada de peligro para los locales llegó el definitivo 2-1. Buena jugada de Munir por banda derecha que acababa con un balón al punto de penalti para que Suárez hiciera un gran gol que suponía la victoria para los suyos.
Sufrido, trabajado, pero merecido triunfo para el Barcelona que tras la derrota de la Roma ante el BATE, ya es líder de grupo con cuatro puntos.
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