El Linares se juega hoy el trabajo de una temporada y el sueño de muchas. La permanencia queda a noventa minutos y a lo que decida el balón. Ya lo vimos anoche en Milán. Nada está escrito, todo cambia en un instante. Sin embargo, y después de un intenso final de temporada y de un partido muy duro en Cáceres, el equipo de Torres se planta en Linarejos con la certeza de que su futuro depende de ganar el partido de hoy y eso, tan fácil o tan dificil, está en sus manos. El Linares es dueño de su destino. No es poco pero hará falta más. La grada de Linarejos va a ser, una vez más decisiva. Lo saben los jugadores, lo sabe la afición y lo sabe el equipo rival que llega a Linares con la consigna de aislarse y jugarlo todo al balón y a lo que ocurra en el campo.
Linares es hoy una ciudad que respira fútbol por los cuatro costados. Nadie es ajeno a lo que ocurre en torno al balón y la historia futbolística de la ciudad. Da igual que sea aficionado o no, la ciudad se ha puesto el traje de la ocasiones, de las grandes jornadas en las que no se respira con los pulmones, se respira con el corazón. Linares sabe como laten los corazones futbolísticos cuando se juega un partido como el de esta tarde. Nadie quiere mirar hacia otro lado y eso hará que se rompan las costuras del mítico estadio.
Desde Huesca, donde libran una batalla muy parecida, dos hombres ligados a la
ciudad de Linares, han hecho llegar a palabradefutbol.com sus sensaciones. Conocen perfectamente la ciudad y al equipo. Uno nació en Linares, Juan Antonio Albacete Anquela, entrenador de la SD Huesca y no duda: «No tengo duda de que el equipo, con su trabajo y la afición con su apoyo incondicional, van a lograr el objetivo. Es muy importante la unión de estas dos fuerzas. Estoy seguro de que con eso el Linares se quedará en la categoría. Desde aquí mando todo mi apoyo y mi deseo de que se consiga la victoria». Braojos, Secretario Técnico del Huesca, ha entrenado a ambos equipos y analiza así el partido: «He entrenado a los dos equipos pero, sin lugar a dudas, deseo y opino que el Linares está en condiciones de quedarse en Segunda B. Es mejor equipo y el factor campo va a sr decisivo. Esa maravillosa afición va a llevar en volandas al equipo. Quiero mandar mi ánimo a la afición azulilla que merece tener a su equipo en la categoría de bronce»
Está claro que el estadio se llenará y que los jugadores notarán en aliento desde la gradas pero, desde muchos otros lugares, se anima y se alienta al LInares. Tarde para ser vivída. Es otra tarde que pasará a la galeria de episodios estelares en la historia dle deporte linarense. Ahora solo falta que llegue el partido, ganarlo y cerrar de un portazo un final de temporada lleno de zozobras. El Linares depende se sí mismo, eso es medio triunfo,
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