José Temprado.- Sin duda alguna, la imagen que transmitió en la tarde de ayer el Linares Deportivo es la que los aficionados azulillos querrán ver durante toda la temporada. No se pudo lograr la victoria ante un conjunto getafense dirigido por Juan Eduardo Esnáider, que buscará el regreso a Primera División esta temporada tras su reciente descenso a la categoría de plata, pero aún así, los de Miguel Rivera mostraron que son un equipo ordenado y tácticamente bien trabajado.
Al llegar al Alhaurín Golf Resort nos encontramos un recinto deportivo sin gradas que hacía complicado el trabajo para los medios de prensa, más complicado aún por la poca colaboración que ofreció el Getafe C.F. Por suerte, el jefe de prensa del Linares Deportivo y el personal del hotel si estuvieron a la altura. A pesar de la ausencia de gradas, se dieron cita cerca de un centenar de aficionados, todos ellos azulillos.
Rivera presentaba un equipo que puede parecerse mucho al «once» titular que debute en el Cartagonova, con la sorpresa de ver en el mediocentro al canterano Sergio García. Un claro mensaje de Rivera a aquellos canteranos que piensan que no tendrán oportunidades en el primer equipo y prefieren buscar una salida, aunque si Sergio fue titular, no solo fue por eso, sino porque día a día se lo ha ganado con su trabajo. Ese es el secreto del éxito; trabajo y constancia, y quien está dispuesto a darlo todo, acaba teniendo su recompensa. Por contra, lo fácil siempre es abandonar.
En cuanto al encuentro, lo cierto es que los azulillos salieron respetando mucho al Getafe, pero tras la ocasión de Álvaro Vázquez en el minuto 10, los azulillos perdieron todos los respetos. Álvaro Vega evitó un gol bajo palos. Tanto perdió el respeto el Linares Deportivo que, tan solo dos minutos despues, Corpas y Mario Sánchez crearon peligro por la derecha hasta el punto de que la defensa getafense tuvo que emplearse a fondo para sacar el balón cuando se dirigía al fondo de la portería.
En el minuto 22 era Joselu el que sacaba de la chistera un espectacular pase interior para habilitar a Casi, que con poco ángulo pudo rematar con pierna izquierda, aunque el disparo se marchó por poco a la izquierda de Alberto García. Siguió intentándolo el delantero azulillo, en esta ocasión a pase de Corpas en el minuto 35, pero la oposición getafense impidió que rematase entre los tres palos. La sensación que transmitía el Linares Deportivo era de clara superioridad ante un Getafe maniatado. Así se llegaba al descanso.
Comenzó el carrusel de cambios en el conjunto azulillo (ayer de verde), mientras que Esnáider movía el suyo con timidez, consciente de que el Linares era superior a su equipo. El partido estaba intenso, pero sin ocasiones hasta el minuto 75, cuando Fran Lara dentro del área trató de batir al meta David Gil, pero el disparo del montoreño no fue lo preciso que deseaba. Tambien Chomfli tuvo las suyas para plantarse ante Gil, pero en ambos casos sus controles se fueron largos.
El gol del Getafe llegó en el 85 por obra de Facundo, que aprovechó una indecisión defensiva para batir a Lopito. Era un jarro de agua fría para un conjunto azulillo que, a pesar de los contínuos cambios, mostró en todo momento el orden táctico que persigue Rivera. Dieron igual los nombres que estuvieran sobre el terreno de juego, el Linares Deportivo muestra tener una plantilla equilibrada a la que solo le falta una cosa; quizá lo más importante: el gol.
Rivera se mostró satisfecho tras el encuentro y reconoció que el equipo trabajó y demostró que va por el buen camino. Admitió el preparador azulillo que juegue quien juegue, el equipo no baja el nivel, aunque si comentó que en los últimos minutos tuvo que recomponer la defensa con futbolistas que no participan en esos puestos y que quizá por eso llegase el gol.
Los azulillos vuelven a jugar el domingo en Martos. Un partido en el que el Martos CD aprovechará para rendir homenaje al siempre presente Fran Carles, y es que cuando su padre jugaba en la ciudad de la peña, Fran militó en su escuela de fútbol.
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