Chico, «la leyenda del Gran Capitán»

José Temprado// Francisco Pérez Pérez colgó las botas al finalizar la pasada temporada.Fueron muchos años de buen fútbol, muchas lecciones ofrecidas sobre el verde de los terrenos de juego de nuestro país, por eso hoy, y siempre, es buen momento para recordar… «la leyenda del Gran Capitán».

Hace poco más de dos años, en la peor situación deportiva que recuerdo, entendí la grandeza de un referente como Chico y de lo que representaba, no solo para el Linares Deportivo y su afición, sino para el fútbol en general. Siempre lo vi como un futbolista cuya veteranía lo hacía especial. Él sabía estar, sabía como actuar en cada situación y sabía reconducir cualquier adversidad, pero aquel día entendí que Chico, en su soledad, también es una persona de carne y hueso.

El Linares Deportivo se había quedado sin el ansiado ascenso y todos los azulillos lloraban desconsolados. Todos excepto Chico, que había tratado de animar a sus compañeros, eso si, con los ojos arrasados en lágrimas. Pensé que era «el hombre de hierro», pero no. Era el «Gran Capitán», el mismo que tras hacer honor al brazalete, se encerró junto a su soledad en el cuarto de las botas para llorar como un niño pequeño. Fuí un privilegiado por poder acercarme a él en aquella situación. Chico en esos momentos no era consciente de quien se encontraba a su alrededor, pero si, allí estaba yo. Aquellas lágrimas me hicieron entender que Chico lloraba, no solo por el fallido ascenso, sino porque entendía que el fútbol había sido injusto con él. Por suerte, 365 días más tarde, se hizo justicia deportiva y los azulillos lograban el ascenso.

Aquella situación me enseñó que la relación de Chico con el fútbol era algo excepcional. Aquello, junto con los desgraciados acontecimientos que el fútbol, y concretamente el fútbol azulillo, ha vivido este verano, me ha animado a rendir homenaje a un icono del fútbol en Linares, en Jaén, en Andalucía, también en España y, como no, en Lupión.

Debo agradecer la colaboración de todas las personas que colaboran en este documental. Todos, absolutamente todos, aceptaron de buen grado y con ilusión su participación en el vídeo. Debo reconocer que, en este trabajo, falta la participación de personas que marcaron la vida deportiva de Chico, pero en la mayoría de los casos, la distancia, dificultó el trabajo. Especialmente clavada tengo la ausencia de Luis Fiñana en este documento. Él fue, probablemente, la persona que dio la gran oportunidad al Gran Capitán, pero las fechas vacacionales me han impedido acceder a él. Hubiera servido un pequeño vídeo grabado con un móvil, pero entendí que no era oportuno molestar a este señor en estas fechas. Aún así, estoy seguro de que cientos de personas se verán identificados con este vídeo aunque ellos no aparezcan directamente.

Debo agradecer también a los compañeros de TELEVISIÓN LINARES el trabajo realizado en el montaje de este documental y en la grabación de la entrevista a Chico. En especial a Jorge Pozas, que una vez más ha hecho honor a esa mala costumbre suya de concederme todos mis caprichos. Sin él, este documental no sería posible.

Como podréis comprobar, este es un documental muy emotivo. En él repasaremos los mejores momentos de Chico como futbolista, sus recuerdos de infancia y otras muchas cosas. Hemos tratado de hacer un trabajo muy personal que quede siempre en el recuerdo. No he querido insertar publicidad a pesar de las oportunidades surgidas porque no he querido hacer un vídeo comercial, sino un vídeo homenaje a un icono del fútbol. Él ya ha podido disfrutarlo en la intimidad de su familia. Ahora solo me queda desear que todos los que alguna vez habéis disfrutado con su fútbol y/o con su amistad, disfrutéis también con este documental.

De Chico seguiremos disfrutando en los campos de fútbol. Sus enseñanzas a los más pequeños, y su trabajo con el filial azulillo, hará que dentro de otros 26 años, tras lograr éxitos allá donde se proponga, otro loco como yo realice la segunda parte de este documental. Ya tiene título…. «Chico, la leyenda del Gran Entrenador». Tiempo al tiempo….