La certificación de actividad económica se ha dado. El Real Jaén cumple con su obligación ante los jugadores y salda la deuda. Hubo muchas dudas y miedo entre la afición. Había silencios inquietantes que por fin terminan. Prueba superada. La nueva propiedad del club se presentará ante sus seguidores con un aval importante.
Membrado no es un hombre de fútbol y, además de que lo haya reconocido, se le ha notado en cada comparecencia. Quizás al Real Jaén le venga bien que llegue alguien que no se ampare en los tópicos y que, de verdad, considere a la entidad como un negocio que acepta soluciones imaginativas.
De todas formas el tema deportivo está en muy buenas manos. Se ha creado una sinergia que puede cristalizar en resultados positivos. Cada palo que agunte su vela y que los que saben de la materia puedan trabajar, con apoyos, pero sin interferencias. Esto parece garantizado. La presencia de Fernando Campos en la dirección deportiva es un seguro de eficacia. Tiene un profundo conocimiento futbolístico y sabe qué pasa por la cabeza de jugadores y entrenadores. Ha sido un referente en la historia del Real Jaén y en el banquillo cuenta con uno de los entrenadores con más proyección del fútbol en la provincia de Jaén.
Valenciano tendrá en Fernando Campos un oráculo, además de un responsable deportivo. La simbiosis es perfecta. La juventud de Valenciano, para algunos, puede ser un problema. Creo que es al contrario. Llega sin rémoras, sin lastres ni compromisos. Viene a labrarse un porvenir y a prestar al Real Jaén un servicio. Lo tiene claro. Cuando llegó hubo un momento de perplejidad. Antes que a él, desde sectores pretendidamente influyentes, se quiso colocar a otros pero una cosa es creerse con fuerza y otra, tenerla. Por fortuna para el Real Jaén, Valenciano fue el elegido. Después el balón le ayudará o le volverá la espalda pero eso, en fútbol, no cambia. Además de conocimiento hay que tener suerte.
La planificación deportiva está teniendo subidas y bajadas. No es fácil hacer un dibujo rápido en mitad de muchas estrecheces pero, eso es lo importante, la idea existe y la hoja de ruta está trazada. Hay un plan A y alternativas de garatía para el esqueleto fundamental. La plantilla del Real Jaén para la próxima temporada estará marcada por la personalidad futbolística de Valenciano, por la exigencia de la categoría, de los campos donde se va a jugar y por la impaciencia por salir de Tercera. Realidad compleja que se puede manejar logrando equilibrio entre necesidad, urgencia, criterio y eficacia. En cualquier caso, una vez que se presenten mañana las líneas maestras del nuevo proyecto, habrá más datos y más luz sobre lo que hasta hoy han sido intuiciones o noticias incompletas.
Empieza una nueva etapa. Desconozco por completo los fundamentos en los que se apoya la idea empresarial, diversificadora e imaginativa de Tomás Membrado. Lo que sí conozco es la solidez y la capacidad de quienes sostienen la parcela deportiva. Esa no es garantía pequeña. Si lo demás tiene bases de parecida solvencia, quizás estemos ante un proyecto que puede cambiar el curso de una historia reciente cargada de desatinos. Solo queda esperar.
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