Ni Atlético de Madrid ni Real Madrid llegan al primer derby madrileño de la temporada -entre los dos grandes de la comunidad- en su mejor momento. El Real Madrid, tras la derrota inesperada en Girona, vuelve a jugar a domicilio ante el equipo de Simeone, el equipo que mejor le tiene tomada la medida en Liga en las últimas temporadas, y por primera vez en el Wanda Metropolitano.
La recién estrenada casa de los atléticos está invicta en Liga -no así en Champions, donde ya la saqueó el Chelsea-. En el campeonato doméstico, el cuadro de Simeone suma 23 puntos, los mismos que su eterno rival, y ambos se sitúan a ocho del líder, el FC Barcelona, y al cuatro del sorprendente Valencia de Marcelino.
Sin duda, es uno de los grandes partidos de la temporada. El Atlético, eliminado prácticamente de la Champions League, tiene el deber imperioso de hacer una gran temporada en Liga, y lo hace tras la enésima declaración de Griezmann con tinte polémico. El triunfo sería el bálsamo necesario para los colchoneros. El Madrid, a estas alturas, se ve casi apeado de la Liga, pues nunca ha remontado ocho puntos a los catalanes, por lo que no sumar los tres puntos en el Metropolitano si que supondría el adiós definitivo a cualquier sueño de remontada.
Por suerte, Zidane ha conseguido recuperar a Luka Modric -tocado con su selección- y Carvajal -tras mes y medio de baja-. También Isco parece estar al cien por cien, tras la dura entrada de Waston en el partido ante Costa Rica que el malagueño jugó con la selección. Al parecer, el Atlético podrá contar con Koke, aún algo renqueante. Quienes no jugarán seguro serán Navas, Bale y Kovacic por parte blanca.
Foto: Realmadrid.com
Follow
