Los sueños se repiten o el trabajo ofrece rendimientos que parecen sueños. El equipo jienense de Fútbol Sala «Jaén Paraiso Interior» vuelve a colarse con autoridad y sin complejos en la élite de este deporte. Ya no es una sorpresa. La noticia alegra pero no extraña a nadie. A falta de jugar el partido contra Gran Canaria, en Jaén, ya se celebra la fiesta de Copa. Resultados de otros partidos le han abierto la puerta anticipada. Los amarillos vuelven a disparar la imaginación y evocan glorias pasadas y cercanas. Posibles de nuevo.
Es la tercera vez que acuden a la cita de la final copera. Ya la han ganado. Son un enemigo incómodo en este torneo y los equipos con más pedrigí lo saben. Los jienenses no llegan como figurantes. Son alternativa en una competiión en la que están inscritos como ganadores. Con el equipo de Daniel Rodríguez estarán los siete clasificados restantes entre los que, como siempre, estarán los transatlántios de este deporte. Barcelona, Pozo, Movistar…y el equipo de Jaén.
El próximo mes de marzo Madrid será la sede de la Copa del Rey de Fútbol Sala. El equipo amarillo, como ocurriera en Ciudad Real, sentirá de cerca el aliento de su afición que, desde antes de confirmarse la clasificación ya movía ficha y planeaba el desplazamiento masivo a la capital de España. Estar ya es una fiesta para la afición jienense. Sin embargo, eso impulsa más, nadie descarta que los chavales de Daniel Rodríguez lo vuelvan a hacer. Hay un equipo con jerarquía, con capacidad de competir con los mejores y con la idea de que los milagros, con talento y más trabajo, se pueden repetir. Es fiesta en el deporte de Jaén, es fiesta grande en el Fútbol Sala de Jaén. Hoy es fiesta.
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