Juanma Pérez Campos.- Este atípico y trágico 2020 para muchos, ha sido fabuloso para nuestro piloto Carlos Sainz Cenamor, (Madrid, 12-04-1962).
Primero fue el campeón del Rallye Paris-Dakar, celebrado en Arabia Saudí en los primeros días del mes de enero.
Acto seguido, y por votación popular, fue nombrado el Mejor Piloto de Rallyes de la historia, por delante de grandes campeones como Ari Vatanen, Juha Kankkunen, Tommi Makinen, Sebastian Loeb, etc., grandes pilotos de rallyes, incluso con mayor palmarés.
Esta trayectoria inagotable,ha sido reconocida con el Premio Princesa de Asturias de los Deportes 2020, “el que más ilusión le hacía”, según su hijo Carlos Sainz junior, y siendo la primera vez que se concede este galardón a un deportista del motor en dura competencia con otro gran campeón español, Marc Márquez, ocho veces ganador del mundial de MotoGp.La entrega de este prestigioso premio, se celebrará el próximo mes de octubre. Sinceramente el merecimiento ha sido para Carlos, después de una trayectoria de treinta años al máximo nivel en competiciones oficiales, ya que ni siquiera el gran Ángel Nieto, 12+1 veces campeón del mundo de motociclismo (como el se autodefinia por su supertición) pudo conseguir el preciado galardón.
Sainz empezó compitiendo muy joven. Casi nadie sabe que con 16 años fue campeón de España de squash. La afición al automovilismo se la inculcó su hermana mayor, que le dejaba conducir un Seat 600.
Los que introdujeron a Carlos en el mundillo de los rallyes fueron Juan Carlos Oñoro, que luego sería su cuñado y por aquel tiempo era piloto oficial de Chrysler y Juanjo Lacalle, que sería su mánager en su etapa del mundial de rallyes.
Su bautismo de fuego en las carreras fue a los dieciocho años, con un Renault 5 ts comprado por su padre.
Ford lo fichó para el campeonato de España, siendo campeón con la marca y debutando en el mundial de rallyes en el año 1987, con un Sierra RS cosworth.
Toyota lo ficha en el año 1989, ganando el Mundial al año siguiente, siendo el primer español en ganar un título en esa especialidad, consiguiendo un segundo título en el año 1992.
Carlos se retiró del mundial de rallyes en el año 2004, después de una larga y exitosa carrera, y haber ganado un sinfín de pruebas.
Nuestro campeón no podía estar inactivo, y el año 2005 ficha por Volkswagen para poner a punto el VW Touareg a fin de participar en el rallye Dakar del año siguiente, donde ganó cuatro etapas.
En 2007, problemas mecánicos le relegaron a la novena plaza. En 2008 se suspende el rally por problemas se seguridad, pasando a celebrarse el 2009 en Sudamérica.
Tras ir liderando con una ventaja de 27 minutos sufre un accidente a falta de tres días para el final, no pudiendo continuar por la grave lesión de su copiloto.
En 2010 se convierte en el primer español en ganar el Dakar en coches, delante del qatari Nasser Al-Attiyah y Mark Miller, consiguiendo el triplete para Volkswagen.
No hubo suerte en 2011, donde acabó tercero después de romper la suspensión delantera. Vuelve en 2013 con un buggy de tracción trasera colaborando en su desarrollo y acabando en 2014 en octava posición tras dos accidentes.
Dada su experiencia y conocimiento para la puesta a punto de los coches de competición, Peugeot lo ficha para el Rally Dakar del 2015. Siendo líder en 2016, tiene que abandonar por rotura del cambio, debiendo abandonar también en 2017, por un aparatoso accidente. El Dakar es una prueba muy traicionera.
A los mandos del Peugeot 3008 dkr maxi, por fin se proclama campeón del Dakar en el 2018, con su copiloto Lucas Cruz, aventajando en 43 minutos a Nasser Al-Attiyah.
En 2019 ficha por el equipo X-Raid para disputar la carrera con un Mini Buggy, consiguiendo su tercer Dakar en este año 2020.
¿Seguirá compitiendo Carlos Sainz?. Sólo él lo sabe. Lo que está claro, es que nadie llegará a alcanzar sus metas.
El rey ha conseguido la princesa de sus sueños.
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