El fútbol femenino tuvo un fecundo espacio de debate en Torredonjimeno. El pasado lunes se celebró en la Casa de la Cultura «Gabriel Celaya» una jornada de igualdad en el deporte: «Fútbol Femenino. Fenómeno Social». Estuvieron presentes y prestaron sus experiencias Lola Romero, máxima responsable del fútbol femenino en el Atlético de Madrid; Isabel Guerrero exjugadora del Málaga Club de Fútbol, dirigente de clubes, entrenadora de fútbol y representante de AFE en Andalucía; Ana Belén Jurado, Delegada del Comité Andaluz de Entrenadores en Jaén, jugadora, entrenadora y seleccionadora; Lucía Fernandez, medica del At. Mancha Real y Desirée Amaro, Coach. Amaro ha estado al frente de varios equipos de diferentes categorías como responsable de esta área, experta en desarrollo personal, experta en construcción, evolución y gestión de equipos.
La iniciativa partió del Ayuntamiento de Torredonjimeno a través de su Concejalía de Igualdad y Deporte. La responsable de estas áreas, la concejala Ana Belén Lara intervino al comienzo del acto y puso de manifiesto el compromiso de su departamento con el deporte y con el papel de la mujer. La visibilización, la participación, el convencimiento y los esfuerzos por la igualdad fueron los ejes de su intervención. Lara manifestó su satisfacción por haber reunido a referentes del fútbol femenino y tener en la sala a jóvenes jugadoras, a técnicos y a representantes de diversos clubes de la provincia (Torreperogil, Martos, Mancha Real y Torredonjimeno). Durante el debate, Ana Belén Lara intervino y trasladó a las ponentes diversas cuestiones relacioandas con sus diferentes papeles profesionales y las sensaciones al desenvolverse en espacios tradicionalmente masculinos.
Lola Romero, intervino para hacer un repaso a la situación actual del fútbol femenino y explicó cómo se ha llegado a la actual estructura de éxito que representa el Atlético de Madrid Femenino, uno de los referentes del fútbol femenino español. Destacó el momento actual de la mujer en el deporte y puso de manifiesto los esfuerzo individuales y colectivos. «De las precariedades iniciales, dijo Romero, hemos pasado a un espacio muy profesional en el que nuestras jugadoras están muy cerca del fútbol profesional masculino. Hay mucho margen para avanzar pero somos conscientes de dónde venimos y dónde estamos en este momento». La representante del At. de Madrid se refirió también a lo largo de su intervención a los tabues, las discriminaciones, los prejuicios y las dificultades que la mujer tiene que superar para alcanzar sus objetivos. En este sentido se mostró optimisma porque, según indicó: «El proceso es imparable».
Isabel Guerrero es una de las pioneras del fútbol Femenino en España y líder destacada de este deporte en Andalucía. Desde Málaga Guerrero impulsó, junto a Antonio Hernández Navarrete, un movimiento singular que logró alcanzar metas impensables para el fútbol femenino en aquel momento: «Fuimos un equipo que marcó época, superamos todas las pruebas que nos puso una sociedad que desconocía e ignoraba el fútbol femenino y fuimos capaces de dar vuelta a esa situación a base de esfuerzo, sacrificio y una pasión a prueba de todo, que trajo como consecuencia la casi normalización y la consecución de títulos nacionales como la Liga o la Copa de Su Majestad la Reina. Pasamos de jugar donde podíamos a llegar a las portadas de los periódicos»
Ana Belén Jurado relató su experiencia y lo que ha considerado siempre su afición irrenunciable: «Yo he crecido jugando al fútbol en la calle y compitiendo con niños. Entonces había pocas niñas que hicieran lo mismo y me tuve que adaptar a jugar con los niños y a soportar las críticas y hasta los insultos de quienes no entendían que aquello fuera lo normal. No hubo nada que me retirara de la pelota y desde entonces, además de mis estudios y mi profesión, he estado y sigo estando ligada al fútbol. He jugado, he entrenado equipos de niños y de niñas. He sido Seleccionadora Andaluza y en la actualidad dirijo una Delegación de entrenadores en la que, pesea que soy mujer, los números son muy claros. Tenemos 800 entrenadores y sólo 30 son mujeres. Avanzamos pero hay mucho que hacer todavía»
Lucía Fernández, expuso su vinculación al fútbol y dejó claro que en su ámbito profesional cercano no ha tenido problemas a la hora de desarrollar su trabajo con normalidad, sin embargo reconoce que hay un poso de recelo en otros ámbitos que aún no se termina de superar: «En mi caso es natural que esté en un equipo de fútbol. Mi casa era fútbol.Mi padre estaba y está ligado al At. Mancha Real, mi hermano futbolista también y yo, lógicamente, de niña jugué al fútbol. En el equipo me siento una más y veo que mi trabajo se valora en el aspecto profesional y humano. Es cierto que he tenido algunos episodios de rechazo o, simplemente de duda, por ser una mujer en un marco en el que algunas personas consideran anómala la presencia femenina. Casos aislados ya»
Desirée Amaro cerró el turno de exposiciones individuales y puso de manifiesto su experiencias en vestuarios masculinos en los que ha trabajado: «Siempre me he sentido cómoda y segura en mi trabajo, sin embargo he sido consciente de que a mi condición profesional siempre era observada y juzgada de manera especial, unas veces con escepticismo y otras hasta con desprecio. Por fortuna los entrenadores y los jugadores han entendido mi papel y normalmente he gozado de libertad. La mujer siempre tiene que demostrar más, no importa que su cualificación sea alta y muy sueperior a alguien que hace lo mismo pero que es del otro sexo. En el fútbol, y muchas veces en otros ámbitos, una mujer ante un profesional masculino parece que siempre es menos. Cambiar definitivamente eso es el reto»
Tras las exposiciones individuales se produjo un intenso debate en el que participaron los asistentes. El logro de la Selección española en el Mundial fue uno de los temas recurrentes y se valoró tanto en lo deportivo como en el impacto social vinculado a los incidente protagonizados por Luis Rubiales.
La jornada terminó con muestras de sartisfacción general y con la sensación de que se está en el camino pero que hay muchos tramos que recorrer para alcanzar lo que las mujeres persiguen en este momento.
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