Schuster se acerca a lo que quiere. El equipo avanza como equipo y empieza a tener continuidad en los movimientos que lo van a identificar a lo largo de la temporada. No era fácil. El Málaga viene del otro mundo y volver a lo terrenal nunca es sencillo. Anoeta era un espacio complicado para este Málaga en transición. El conjunto local podía reaccionar de cualquier manera tras el palo europeo. Salió cara para los malagueños. El conjunto vasco, tocado en las piernas y en la cabeza, quiso cumplir con su obligación y trató imponer el ritmo del encuentro. Solo fue un intento porque el equipo del alemán se ajustó perfectamente a las necesidades del partido y secó las intenciones ofensivas de la Real Sociedad y, en algún momento, pudo sacar ventaja de sus llegadas al portal de Bravo. No hubo sin embargo claridad ni por una parte ni por la otra y tanto la primera como la segunda parte se iban a consumir con el marcador sin movimiento. Lo tuvo muy cerca el Málaga, estuvo a un paso. Sin embargo en fútbol cuando te llegan hay que matarlas y en eso falló el conjunto andaluz, en la espada. La Real debe volver a su línea y tratar de que no le afecte el mal de altura, ese que sufren los modestos cuando sube a la cima europea.
El empate puede ser justo pero el Málaga, seguramente, tuvo una muy buena ocasión de haber ganado. Generó ocasiones y eso, además del empate, es una forma de confirmar el crecimiento. La Real es mucho más de lo que demostró en este partido y el Málaga debió aprovechar la oportunidad para sellar una segunda victoria consecutiva, que hubiera venido muy bien para la consolidación del proyecto futbolístico que dibuja Bernardo Schuster.
Real Sociedad, 0: Bravo; Carlos Martínez, Mikel, Iñigo Martínez, José Ángel; Bergara, Rubén Pardo (Zurutuza, min. 65), Xabi Prieto; Vela, Castro (Griezmann, min. 65) y Agirretxe (Seferovic, min. 75).
Málaga, 0: Caballero; Jesús Gámez, Sergio Sánchez, Angeleri, Antunes; Tissone; Duda, Sergi Darder, Portillo (Camacho, min. 83), Eliseu (Morales, min 54) y El Hamdaoui (Santa Cruz, min. 65).
Árbitro: Teixeira Vitienes. (Cantabria). Amonestó a Iñigo Martínez, Pardo, Xabi Prieto, Sergio Sánchez y Angeleri.
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