El Real Madrid va recuperando, poco a poco, el sello Zidane. Desde lo esencial del francés, como es la mejora del juego frente al caos que se ha vivido esta temporada, hasta lo irónico: Lucas Vázquez parece elegido, de nuevo, al ser el jugador que sale del banquillo, como revulsivo, en el minuto 70. Zidane para lo bueno y, también, para lo menos bueno.
Pero lo que es evidente es que mucho tiene que cambiar el panorama para la próxima temporada, y eso pasa por traer numerosos refuerzos a la Castellana. Ante el Getafe, como se ha dicho, el equipo hizo un buen partido, pero le faltó puntería en los últimos metros.
Benzemá pudo anotar al inicio del encuentro, pero no pudo concretar. De los tres atacantes, pese a todo, el mejor fue Brahim, que ha demostrado en tres partidos mucho más que otros compañeros a lo largo de la temporada. Y, el menos acertado fue, de nuevo, Gareth Bale. Parece evidente que el galés está jugando sus últimos partidos como jugador blanco.
También pudo ganar el Getafe si hubiese anotado Mata alguna ocasión muy clara que tuvo. Pero Keylor Navas estuvo muy bien. Es pronto para aventurarse, pero la vuelta del francés trae consigo una duda en la portería: ¿será capaz Courtois de quitarle el puesto al costarricense, al que tanto quiere Zizou?
El 0-0 sirve, para los visitante, de muy poco. Quedarán terceros salvo descalabro del Atlético de Madrid. Los del sur de la capital, por su parte, luchan por la cuarta plaza que da acceso a Champions. A cuatro jornadas del final, la tienen, pero están igualados a puntos con un Sevilla que no se lo pondrá nada fácil.
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