Opinión.
Al Thani ha metido en un jardín al Málaga. Justas o no, no voy a entrar en eso, sus quejas vertidas ayer vía Twitter no han dejado indiferente a nadie, ni mucho menos a la UEFA que, muy estricta en este tipo de cosas y no en otras, valora la posibilidad de sancionar al club. Veremos en qué queda.
Nos ponemos en situación. El Málaga fue injustamente, en eso si entro, eliminado de la Champions League a manos de un árbitro cuyo nivel quedó retratado durante el partido. El jeque, molesto, como la inmensa mayoría de la afición malaguista -y la que no es malaguista- abrió su twitter y se expresó. Hasta ahí bien. Es una persona, como nosotros -con más dinero eso sí- que se calienta ante las injusticias. El problema es que acusó a la UEFA de racismo, no es la primera vez que lo hace, y enlazó tres o cuatro tweets que no han hecho mucha gracia a la cúpula más alta del estamento que rige el fútbol europeo.
¿Debió ser más precavido en sus acusaciones?
Sinceramente pienso que sí. Cuando estás al mando de algo tan importante como es el club que mueve el sentimiento de miles de aficionados, lo que menos se espera es un poco de responsabilidad y saber estar. Entiendo el calentón del jeque, algunas de sus lamentos hasta los comparto, pero dicen que cuando uno pierde las maneras pierde la razón y para mí Al Thani la perdió.
¿Debió estar con el equipo en Dortmund?
Rotundamente sí. Desconozco, aunque los intuyo, los motivos por los que el jeque no apareció, ni aparece, por Dortmund o por la Rosaleda -no lo hace desde el Málaga-Milán del 6 de noviembre- pero creo que el partido más importante de la historia del club, del cual es propietario, merecía al menos un esfuerzo por estar en el palco. Los jugadores necesitan sentir ese respaldo y quizás requerían de unas palabras tranquilizadoras de su presidente en el funeral que debió ser su vestuario tras la eliminación.
¿Debe parecer más implicado con el proyecto cara a la afición?
El jeque no define a su afición qué va a pasar el próximo verano con el club y ésta se hace multitud de preguntas: ¿Cuál va a ser la inversión?, ¿cuál el proyecto?, ¿seguirá Pellegrini?, ¿habrá necesidad de vender a Isco? más un largo etcétera que crea, sobre todo, incertidumbre. Dicen que no basta serlo sino que además también hay que parecerlo. Al Thani, de momento lo es (presidente) pero no lo parece.
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