Inicio Noticias Alcorcón 0-0 Betis: Oda a las amonestaciones en Santo Domingo

Alcorcón 0-0 Betis: Oda a las amonestaciones en Santo Domingo

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La AD Alcorcón y el Real Betis Balompié han empatado (0-0) en la décimo novena jornada de la Liga Adelante. El encuentro, marcado por continuos encontronazos, nunca terminó de abrirse y los goles quedaron pospuestos hasta otra ocasión.

Betis AlcorcónLlegado el minuto 94 de juego el balón seguía volando de lado a lado, sin rumbo fijo y propulsado por cabezazos y patadas a seguir. Ambos equipos jugaban ya con un hombre menos y desde la grada el único sonido que se escuchaba era el de los pitos. Una hora y media antes todo era diferente, nadie estaba avisado de lo que ocurriría.

Cantaba por entonces la afición local y también la visitante. La realización escrutaba el rostro de Pepe Mel y la expectación era alta por ver qué Betis haría acto de presencia en el Estadio Municipal de Santo Domingo. Todo eran risas hasta que el cuero comenzó a rodar. Los verdiblancos, con las cartas marcadas y obligados a mandar, se redescubrieron inútiles al formar en la medular con la pareja N’DiayeXavi Torres.

Por su parte el Alcorcón, temeroso a caer en una emboscada, prefirió no probar fortuna y seguir con su plan preestablecido: marcaje férreo a Rennella y Rubén Castro. Los locales se acomodaron sobre el césped y pronto supieron que les bastaría con no equivocarse mientras calcaban los movimientos de su rival.

Cerca estuvo por momentos el Betis de cantar gol -uno entró aunque quedó anulado por fuera de juego- pero una vez las principales ocasiones fueron desaprovechadas el tren pasó para no volver. Desde entonces la frustración creció a ambos lado del frente y el partido quedó reducido a un intercambio de golpes para ir saldando cuentas pendientes.

El colegiado, hasta entonces en papel de secundario, vio libre el escenario y brindó al público una de sus actuaciones más memorables, gracias a la inestimable colaboración de los 22 futbolistas sobre el campo. Once amarillas y dos tarjetas rojas fue el balance final. No hubo goles, pero cuando el pitido final retumbó ya nadie se acordaba de que existían las porterías. El interés estaba en otro lado.

* Imagen: lfp.es