Villarreal y Sevilla son dos equipos muy trabajados, de eso no hay duda. Sus entrenadores son auténticos obsesos del control de todas las situaciones de partido, y por ello se pudo disfrutar de un partido con alta tensión por lo que había en juego.
Los amarillos llegaban con sed de venganza por las cuatro derrotas que cosecharon frente a los hispalenses la pasada temporada, y no querían dejar ningún detalle al azar y arrancaron fuerte el partido. Tanto fue así, que al minuto de juego, lograrían el primer disparo a puerta con una volea de Bruno que Sergio Rico despejó acertadamente.
Con el paso de los minutos, los de Emery se fueron asentando sobre el verde de El Madrigal, aunque no llegaron a crear una ocasión realmente clara durante el primer periodo. Llegaban a zona de finalización, pero ahí no conseguían tener acierto. Además, los rojiblancos protestaron variadas veces a Campos Salinas alguna que otra falta o un penalti sobre Gameiro que el colegiado no señaló.
En ese sentido, el Sevilla agobiaba a los castellonenses en la salida de balón con una alta presión que dificultaba al equipo de Marcelino García Toral. Sin embargo, llegados al ecuador de la primera mitad, el submarino comenzaba a retomar el pulso al partido, y lo hacía con algunas aproximaciones peligrosas como un cabezazo de Mario Gaspar al lateral de la red o un disparo de Bakambu que Sergio Rico atrapó sin dificultades.
En ese momento, se desequilibraría el marcador a favor del Villarreal. Tras un saque de esquina, Mario Gaspar fue el más afortunado y logró llevarse el balón tras una serie de rebotes y envió el esférico de un punterazo al fondo de la red. La falta de contundencia en la jugada de la zaga sevillista pudo ser una de las claves en el gol del lateral diestro local.
Poco más que contar hasta el descanso. En gran parte del segundo periodo, el Sevilla y Emery decepcionaron. El entrenador vasco no encontraba soluciones y el juego del equipo nervionense no daba muestras de peligro alguno, aunque siempre se mantenía la tensión por lo apretado del resultado.
Por ello fue tan importante en el desarrollo del partido el segundo tanto castellonense. Los locales enlazaron un perfecto contragolpe que acabó con un centro de Mario Gaspar, que recogió en el segundo palo Denis Suárez y el ex sevillista cedió para que Bakambu abriera brecha en el marcador. Por cierto, un Denis que fue mucho más protagonista en la segunda mitad al jugar más por el centro y entre líneas, y que tuvo la opción de sentenciar el partido con un disparo que se estrelló en el larguero.
Con el 2-0, Emery estaba obligado a mover ficha, así casi de una tacada realizó los tres cambios: salían Coke, Krohn-Dehli e Iborra; y entraban Mariano, N’Zonzi y Llorente. Sorprendió, cuanto menos, que con el resultado negativo y ante la escasez de ideas en el equipo hispalense, Reyes acabara sin jugar ni un minuto en el partido.
A pesar de ello, un desequilibrio en banda de Konoplyanka sirvió para que el ucraniano buscara y encontrara la cabeza de Fernando Llorente, que remataba batiendo a Areola, y recortaba de ese modo distancias en el marcador, volviendo a meter a los suyos en la lucha por los puntos del encuentro.
Al final, en el último tramo del encuentro los rojiblancos, que jugaban con 10 ya que Gameiro se tuvo que retirar lesionado, no pudieron empatar con un juego directo intentándolo más con el corazón que con la cabeza. A falta de 5 minutos, Konoplyanka puso en apuros al guardameta del Villarreal con un duro disparo al primer palo que Areola envió ágilmente a córner.
Pero, sin duda, quien más cerca estuvo de lograr la igualada fue el propio Llorente en la última jugada del partido. El riojano remató un saque de esquina botado por Konoplyanka, pero bajo los palos Areola y su defensa acabaron sacando el balón.
Se escaparon unos puntos importantes de El Madrigal y se aleja un rival directo a 8 puntos en la tabla clasificatoria. Sigue sin encontrar la continuidad y la regularidad el Sevilla en liga, y sigue sin poderse llevar los tres puntos fuera de casa en lo que va de campeonato doméstico. Ahora, en una de las semanas más trascendentes del curso, Nervión tendrá que volver a rugir nuevamente para llevar en volandas a los suyos frente a Manchester City y Real Madrid…
*Foto: El Desmarque.
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