La esperanza de seguir en el tercer puesto se esfumó con la aparición de Leo Messi. Tras ocho partidos de Liga, el equipo de Simeone volvió a perder, pagando caro dos despistes defensivos. El empate parecía una buena salida para resolver este partido pero finalmente el Barça salió del Calderón con una victoria con sabor a alcanzar la Liga.
El Atleti, sin dejar su manera de luchar cada balón como si fuera el último, no dejó de pelear en cada jugada por conseguir el gol. El conjunto rojiblanco hizo sufrir al Barcelona, especialmente en la primera parte, donde controlaron el área azulgrana con numerosas ocasiones en las que Ter Stegen salvó sin ningún apuro demostrando su buena posición como portero. La presión ejercida por los de Simeone dejó al Barça ahogado en su campo y sufriendo horrores para salir a la contra, algo que en los últimos encuentros está dejando mucho de qué hablar.
El partido comenzó sin mucho ruido. Los equipos salieron con sus onces estrellas, con la vuelta de Godín y Oblak. Por parte del Barça, la alineación de tres en la defensa con Piqué, Umtiti y Mathieu, resultó extraña para los aficionados ya que el equipo no se encontró hasta la mitad del encuentro. El Atleti, en cambio, a los diez minutos se encontró con facilidad en su juego. Las numerosas ocasiones de Griezmann, Gameiro y compañía dieron la lata todo el tiempo al portero alemán. Lo único que tenía el Barça era nada más que rematar a puerta desde cualquier parte topándose con Oblak, que no parecía haber estado dos meses de baja. En lo últimos minutos Suárez avisó que la segunda parte iba a ser un sinfín de ocasiones.
Y así fue. El Calderón no paró de animar a su equipo, dejándose la garganta en cada jugada. El esfuerzo físico pasó factura al Atleti por lo que el Barça lo aprovechó dejando los mejores minutos del encuentro. Y aquí fue donde cayó el primer tanto del Barcelona a cuenta de Rafinha. Un error defensivo por simples rebotes en el área dejaron tocado al Atleti que tuvo que reformarse para seguir luchando.
Y en esto el Atleti es especialista, en no rendirse. Y por ello, llegó el gol de Godín con aroma a aquel tanto en el Camp Nou que les dio la Liga 2013-14. Esa cabeza prodigiosa del uruguayo que cuando marca da vida al Atleti. El partido parecía acabar en empate. Pero siempre hay que estar atentos a jugadores como Messi que en cualquier momento aparece y le da la vuelta a todo. Y de esta manera llegó el tanto del argentino dejando helados a los rojiblancos. En unos cuantos rebotes el gol acabó en la portería de Oblak. El Barça se llevó los tres puntos después de un tenso y difícil partido.
El Calderón se despidió del Barça con una derrota. Y esta vez la cabeza privilegiada de Godín no fue suficiente ante los azulgranas.
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