Inicio Linares Deportivo Lopito y Hevia rescatan un punto para un buen Linares

Lopito y Hevia rescatan un punto para un buen Linares

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El portero con sus intervenciones y el delantero con un golazo, sumado al trabajo colectivo, logran un punto ante el líder, el Lorca CF (1-1)

 

Hoy es de esos días en los que el aficionado azulillo sale del Municipal de Linarejos orgulloso y muy enfadado. Orgulloso por ver a los futbolistas de su equipo dejarse el alma sobre el verde (que ganas tenía de decir esto), y muy enfadado por la actuación del trío arbitral. No diré yo que el dinero chino que entra en el conjunto lorquino, aparte de pagar nóminas, haga milagros, pero lo cierto es que fue un milagro que el Linares no pudiera llevarse el encuentro, aunque si destacamos a Lopito en el titular, es por algo que les contamos a continuación.

Justo antes del pitido inicial, el Linares Deportivo homenajeó al equipo infantil «A» que ha logrado el campeonato y por tanto, el ascenso a Liga Andaluza. El Juvenil tendrá que esperar, porque aunque ascendido, matemáticamente aún no es campeón, si bien, lo tiene casi hecho.

Los equipos saltaron al terreno de juego y desde el principio se podía observar la igualdad entre ambos conjuntos. No obstante, por encima del cuarto de hora de juego, eran los azulillos los que comenzaban a aproximarse con más fuerza a la meta rival. Lo intetaron desde lejos Rueda y Rodri, pero fue Corpas en el 19 quien hizo trabajar a Dorronsoro. Los hombres de Ferrando se mostraban incisivos por ambas bandas con Joselu e Higinio, mientras que Gonzalo, acompañado de Fran Lara y Cuerva como improvisados centrales se quedaban al cierre.

Los lorquinos trataban de reaccionar con tímidas llegadas, pero el peso del encuentro lo llevaban los de Ferrando. El joven entrenador azulillo ganaba la partida al veterano David Vidal. La más clara del primer tiempo la tuvo Corpas de cabeza, pero su remate encontró las mano de Dorronsoro, que no logró blocar. Hevia tampoco pudo aprovechar ese rechace. Con dominio azulillo se llegaba al descanso.

La segunda mitad comenzaba igual que acabó la primera, con dominio azulillo. En el minuto 53, Corpas pudo inaugurar el marcador, pero Dorronsoro realizó un auténtico paradón para despejar a córner. Ambos conjuntos comenzaban a mover el banquillo en busca de más mordiente. En el 60, Poley iba a abrir el marcador para los visitantes con un auténtico golazo. Recibió el esférico en tres cuartos y desde ahí le pegó. La bola hizo un efecto endiablado y Lopito solo pudo mirar como entraba en la portería. Era el 0-1.

Pero cuando los azulillos dan motivos a Linarejos para creer, ni árbitros, ni destino, ni nadie puede parar a este Linares. Luis Lara y Hevia lo intentaban con disparos que llevaban mucho peligro, y Corpas seguía generando problemas a los visitantes. En el 76 lo intentó Casi, que volvió a ser suplente, pero el balón encontró la madera de Dorronsoro. Ferrando entiende que Casi no se adapta a su sistema de juego. O quizá sea por otro motivo, pero el caso es que el murciano es suplente.

En esos últimos minutos, el que se iba a proclamar protagonista absoluto del encuentro fue el meta Lopito. Hasta en tres ocasiones se plantaron los lorquinos ante el portero azulillo, y en todas esas ocasiones, fue el guardameta el que salió vencedor en el uno contra uno. A pesar de eso, el Linares Deportivo seguía perdiendo, pero creyendo.

A la fiesta de Lopito quiso sumarse Chus Hevia. En el minuto 85, y desde fuera del área, el asturiano sacó un zurdazo que se colaba por la escuadra derecha de Dorronsoro. Era el empate a uno y Linarejos estallaba. Apenas quedaba el tiempo de descuento y los azulillos pudieron llevarse los puntos si el colegiado no hubiera anulado un tanto de Hevia por supuesto fuera de juego (En la imagen parece legal, pero en el campo me pareció fuera de juego) Habría que ver las imágenes, pero lo cierto es que a lo largo de los 90 minutos hubo dos penaltis no señalados a favor de los azulillos; uno de ellos por una mano clarísima. A eso hay que sumar las constantes faltas no pitadas a un equipo y si al otro, y por supuesto, las cartulinas. Lo dicho anteriormente, parecía algo «milagroso».

Por esa acción fue expulsado Ferrando. Entró al campo unos metros para celebrar el gol, pero al anularse, el colegiado (o el asistente concretamente) entendió que esa intrusión era motivo de expulsión a pesar de no haber protesta. Finalmente reparto de puntos y Linarejos en pie aplaudiendo a los suyos. Una comunión que hacía mucho que no se veía y que los nostálgicos echábamos de menos.

¿A qué se debe el cambio de estos jugadores? Es un misterio que nos gustaría que alguien explicase públicamente a final de temporada, pero yo ya les adelanto que muchos futbolistas, lejos de micrófonos, admiten que tras meses sin prácticamente entrenar con el técnico que comenzó la temporada, les ha costado volver a coger el ritmo competitivo. Es cierto que alguno de los chicos aún siguen sin estar a su nivel. Alguno, incluso, ni ha estado ni se le espera, pero a pesar de eso, el equipo, vuelve a ser un EQUIPO dentro del terreno de juego.

El punto azulillo puede ser bueno, si bien, los resultados de la jornada del domingo pueden acercar a los azulillos al peligro. La semana que viene, los de Ferrando viajarán a Melilla. A pesar del empate, este Linares tiene otra pinta…

 

IMÁGENES: Linares Deportivo y Luis Carlos Guillén