Inicio At. Mancha Real Rosi: “En nuestros partidos contra el Granada CF salíamos súper motivados”

Rosi: “En nuestros partidos contra el Granada CF salíamos súper motivados”

Compartir
Once del Atlético Mancha Real en Los Cármenes con Rosi como capitán
PALABRA DE FÚTBOL charla con uno de los jugadores más importantes de la historia del Mancha Real 

Mancha Real vivirá mañana un hito histórico con el enfrentamiento copero ante el Granada CF. Será la primera vez que los manchegos reciban en La Juventud a un Primera División.

Sin embargo, no es la primera vez que el Granada CF juega en estadio mancharrealeño. Ya lo hizo en tres ocasiones a principios de este siglo, militando en Tercera División y sin poder llevarse el triunfo de tierras manchegas. Uno de los jugadores locales que vivió aquellos tres enfrentamientos fue Manuel Rosa Casas. Conocido futbolísticamente como Rosi, es uno de los jugadores más importantes de la historia del Atlético Mancha Real. PALABRA DE FÚTBOL ha charlado con él para rememorar aquellos duelos, recordar su carrera y hablar del ilusionante presente del club de su vida.

“Para nosotros, un equipo humilde, aquellos partidos contra el Granada CF eran como jugar contra el Barça o el Real Madrid”, cuenta Rosi a PALABRA DE FÚTBOL. “Ese Granada CF venía de descender a Tercera administrativamente por motivos económicos, pero era un histórico, con pasado en Primera y Segunda y un equipo siempre puntero en 2ª B”, incide. Por todo ello, recuerda el especial ambiente previo a esos duelos. “Esa semana no se hablaba de otra cosa en el pueblo. Nosotros salíamos súper motivados, con el cuchillo entre los dientes, como se suele decir. Nos hacíamos fuertes en nuestro campo, aprovechábamos el albero y el respaldo de la afición, que llenaba todo el estadio”.

Rosi jugó los tres choques disputados en La Juventud. En el primero de ellos, el delantero mancharrealeño cerró la goleada con el tercer gol de la tarde. “No tengo aquel gol en mi mente pero estos días lo he podido recordar a través de las crónicas. Fue una gran jugada de Chemi, que seguro que me la puso a placer. Aquel tanto era importante por la entidad del rival y por la repercusión que tenía”. Rosi, que siempre se fajó como atacante, valora más si cabe esas dianas. “En mi carrera logré un par de trofeos como pichichi de Regional Preferente, categoría en la que éramos casi siempre uno de los rivales a batir. Sin embargo, en aquella Tercera la cosa cambiaba y era muy difícil marcar en un equipo modesto, que peleaba por no descender como nosotros”.

En los dos siguientes envites entre Atlético Mancha Real y Granada CF en el feudo verde, Rosi también tuvo su cuota de protagonismo. Primero, en el 0 – 0 de la 2003/04 fue titular, protagonizó la ocasión más clara de los locales y contribuyó con su trabajo hasta que fue sustituido por Vacas. Y después, en la victoria por 1 – 0 de la 2004/05 salió desde el banquillo en el minuto 72 para sustituir a Santi y aportar su oficio con la pelota para aguantar el resultado. Junto a aquellos míticos encuentros, también echa la vista atrás hacia los desplazamientos hasta Los Cármenes. “Recuerdo que allí también fuimos capaces de sacar un par de buenos resultados, con dos empates. Solo una vez volvimos goleados. Jugar en aquel campo enorme y con jugadores que venían de superior categoría da más mérito a aquella generación”.

Una generación que en aquel entonces lideró en el banquillo José Jesús Aybar, hoy director deportivo del club. Para Rosi, “el mejor entrenador que he tenido”. “Era, y sigue siendo, una persona muy seria en su trabajo. Un estudioso y conocedor del fútbol de estas categorías, que cuidaba todos los detalles. Junto a Rafa Castillo como preparador físico, formaban un tándem increíble. Aquellos entrenamientos con todos los ejercicios integrados con balón nos cautivaban. Era un innovador, un revolucionario y un adelantado en aquellos tiempos”, señala.

De aquellas plantillas, dos jugadores visten todavía hoy la camiseta del Atlético Mancha Real: Nando y Óscar Quesada. De sus antiguos compañeros, Rosi siente “por un lado, admiración por el éxito que han tenido en su carrera deportiva, y por otro, envidia sana de que a su edad hayan podido y hayan sabido conciliar trabajo y familia con los entrenamientos a ese nivel”. Además, Rosi hace hincapié en que “pese a su edad, Óscar con 43 y Nando con 37 siguen siendo pilares importantes en el equipo. Me alegro de que sigan dando guerra”.

Canterano y buque insignia en La Juventud

Al hablar de dos de los jugadores con los que compartió vestuario, Rosi rebobina y nos habla sobre otros nombres propios en su carrera. Debutó con apenas 16 años en el primer equipo del Atlético Mancha Real de la mano de Ismael Almazán. Y a partir de ese momento, se consolidó con el plantel sénior con otros técnicos como Pepe Hornos y Antonio Calet. “En mis primeros años jugamos un par de liguillas de ascenso a Tercera pero no lo conseguimos materializar”, explica.

Con 19 años, firmó por el Martos CD, con el que protagonizó una sobresaliente temporada en el grupo IX de Tercera División, siendo el máximo goleador del equipo con 13 goles. Esa buena campaña llamó la atención del Real Jaén, que acaba de descender de Segunda a Segunda B. Rosi hizo la pretemporada con el cuadro capitalino y cuando todo hacía indicar que se quedaría, finalmente no fructificó su fichaje. Acabó en el Linares Deportivo que dirigía en Tercera Miguel Rivera. “En Linares no salieron las cosas bien en lo personal y en lo colectivo y en febrero volví al Mancha Real. Jugamos de nuevo la liguilla de ascenso y logramos el primer ascenso a Tercera de la historia del club en la 1998/99”.

Desde ese año y hasta  las 2004/05, Rosi fue uno de los buques insignia del Atlético Mancha Real, que empezó a consolidarse como un club señero en la provincia, también a nivel autonómico. “Mi situación laboral y personal y algún que otro susto con mis rodillas me llevaron a dejar el Mancha Real e incluso momentáneamente el fútbol. Tiempo después volví un par de temporadas en Villanueva del Arzobispo con el CD Villanueva, donde me trataron muy bien y acabé colgando las botas”, reconoce.

Con ilusión por dar la campanada

Rosi, por tanto, fue uno de los que edificó los cimientos del exitoso Atlético Mancha Real de hoy. De vuelta al presente, Rosi explica el cambio de contexto de esta eliminatoria de Copa del Rey con su época. “La historia ha cambiado mucho. Aquel Granada ya era un equipazo, pero desde entonces ha vivido un ascenso meteórico. Volvió a Segunda B, pasó fugazmente por Segunda y ya es un habitual de la Primera División que ha saboreado las mieles de Europa”, indica. “El Atlético Mancha Real también ha evolucionado para bien desde entonces. Se asentó en Tercera División y ahora tras el ascenso a la Segunda RFEF vuelve a vivir un momento dulce”.

En cuanto a las opciones de pasar de ronda, Rosi no descarta la sorpresa. “Desde que se celebró el sorteo la gente está muy animada. Lo palpo hasta en el colegio donde trabajo. La Juventud va a estar a reventar y los jugadores seguro que salen muy enchufados, con ganas de aprovechar cualquier atisbo de relajación del Granada CF”. En la grada, animando a los verdes, Rosi estará junto a sus hijos, a los que podrá contarle que él ya sabe lo que es hacer hincar la rodilla al equipo nazarí.