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El sueño copero de Álvaro Lozano

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El lateral jiennense, en las filas del CD Rincón, se enfrenta al RCD Espanyol

El jiennense Álvaro Lozano revivirá esta noche unas sensaciones que ya experimentó en las filas del Real Jaén CF en la temporada 2012-13. En aquella temporada formó parte de la expedición del equipo lagarto en la visita al Vicente Calderón para enfrentarse al Atlético de Madrid en Copa del Rey. Hoy lo hará con su actual equipo, el CD Rincón en La Rosaleda y ante otro equipo de Primera, el RCD Espanyol.

«Hace diez años viví una experiencia inolvidable con el Real Jaén ante el Atleti y jamás pensaba que iba a volver a tener la oportunidad de jugar de nuevo un acontecimiento así. Esta vez no me lo esperaba y lo afronto con muchísima ilusión», cuenta Álvaro Lozano a Palabra de Fútbol.

A sus 32 años, Álvaro Lozano es un clásico del fútbol provincial. Tras su paso por aquel Real Jaén que logró el último ascenso a Segunda A, ha vestido la camiseta de varios clubes del grupo IX de Tercera. Militó en el Villacarrillo CF, en el Atlético Mancha Real y en la UDC Torredonjimeno, en la que se convirtió en su capitán tras cinco temporadas y media. Sin embargo, su situación laboral le alejó de ese nivel competitivo.

«Por mi trabajo como funcionario me llamaron de Málaga capital y en noviembre del año pasado tuve que abandonar Torredonjimeno. Después jugué unos meses en Begíjar en División de Honor, haciendo un gran esfuerzo para viajar todos los viernes a Jaén. Por eso tenía claro que si esta temporada quería seguir ligado al fútbol tenía que ser aquí en la provincia de Málaga«, alude al preguntarle por su llegada al CD Rincón.

Billete copero a base de tandas de penaltis

Álvaro Lozano llegó a un acuerdo con la entidad rinconera y desde el primer momento ha vivido emociones fuertes. La primera, la Copa de Andalucía, que les ha llevado hasta la Copa del Rey. En octavos de final, eliminaron al Mijas-La Laguna en la tanda de penaltis.

El repentino ascenso de la UD Maracena a Tercera División les dio el pase directo a semis. Y en ellas, se jugaron el pasaporte copero con un viejo conocido suyo, el AOVE Villacarrillo CF. «Siempre es bonito jugar ese tipo de partidos. El Villacarrillo es un equipo muy intenso con un gran entrenador como Toni García. Fue un partido muy igualado que se decidió a nuestro favor en una tanda de penaltis larguísima. Lo celebramos a lo grande, incide.

En la final de la Copa de Andalucía cayeron con el Montilla CF, pero el fútbol les volvió a cruzar en la fase previa de la Copa del Rey. A partido único y en casa del cuadro cordobés. Y de nuevo se resolvió con una tanda desde los once metros. «Ese partido también fue muy emocionante porque el estadio estuvo lleno con 3.000 o 4.000 personas. Estuvimos muy serios y tuvimos más oportunidades en los 120 minutos. Llegamos a la tanda y apareció nuestro portero Joki, que es un especialista. Y conseguimos el premio gordo que era jugar ante un Primera», recuerda Álvaro Lozano.

La suerte del bombo les cruzó contra el RCD Espanyol de Diego Martínez, al que recibirán esta noche (21:00 horas) en La Rosaleda. «Es un histórico, al que hemos visto cientos de veces en televisión. Algunos dentro del equipo tenían otras preferencias, pero viendo lo que se está moviendo entre la afición en el Rincón de la Victoria y en la provincia, estamos muy orgullosos».

El ambiente en el vestuario es de una semana diferente, especial. «Se respira mucha ilusión porque salvo Sergio Molina y algunos compañeros que vivieron la eliminatoria contra el Alavés de hace dos temporadas, la gran mayoría tienen entre 20 y 23 años y afrontan su primera eliminatoria de Copa del Rey. Nos preguntan a los más veteranos y estamos con ganas de que llegue y de disfrutar del partido», declara el lateral derecho lagarto.

Enfrente, un gigante en mala dinámica

El CD Rincón llega al choque en estado de gracia. Es líder del grupo 2 de la División de Honor Sénior con 19 puntos. Está invicto y ha sumado 6 victorias consecutivas. Enfrente, el RCD Espanyol afronta el duelo sumido en una crisis de resultados. El plantel perico es decimosexto en La Liga, a un punto de la zona de descenso. Acumula cinco jornadas sin ganar y sólo ha sumado 3 de los últimos 15 en liza. 

En ese sentido, Álvaro Lozano reconoce que «es cierto que el Espanyol no llega en una situación idónea. Pero ellos son profesionales y hay cinco categorías de diferencia. Nuestro objetivo es plantear el partido para competir y contrarrestar esa diferencia. Vamos a dar la cara como estamos haciendo cada domingo en nuestra liga».

Para ello, han preparado el partido siguiendo la rutina habitual. «La planificación de la semana ha sido como una normal con nuestros entrenamientos del lunes, miércoles, jueves y viernes, que fue algo distinto porque lo hicimos en césped natural para aclimatarnos. Además, nuestra habitual sesión de vídeo sobre el rival y siempre tratando de normalizar el partido para que no nos pese demasiado».

En lo personal, Álvaro Lozano encara el partido con la misma ilusión que hace una década. «Estoy entrenando bien, me he recuperado de unas molestias que sufrí hace un par de jornadas y estoy con ganas de ayudar al máximo posible al equipo«.

Con esa idea, Álvaro Lozano se despide de Palabra de Fútbol no sin antes confesarnos que ayer todavía no habían ensayado los penaltis y que si tiene la suerte de jugar le pedirá la camiseta al jugador del RCD Espanyol que esté más cerca.