Inicio 1ª División El éxito pasa por marzo

El éxito pasa por marzo

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Barcelona MessiComo se diría en estos casos, el Barça afronta desde mañana su Tourmalet particular. A poco menos de tres meses para que termine la temporada los azulgrana se juegan el seguir con vida en las tres competiciones. Tres partidos marcados en rojo en el calendario. Villarreal, Manchester City y Real Madrid. Copa, Liga de Campeones y Liga. Cualquier desliz sería decir prácticamente adiós a un soñado triplete.

El primer asalto será mañana ante el Villarreal en la vuelta de la semifinal de Copa del Rey. El 3-1 de la ida invita al aficionado culé a pensar en una final casi anticipada. Un colchón de goles que no debe atolondrar a los de Lucho. Cosas peores se han visto. Que se lo digan al Getafe del 2007. Neymar pudo (no lo hizo) sentenciar en la ida desde el punto fatídico. Los del submarino pueden reventar la quiniela. Lo hicieron en el Bernabéu y ahora van a por los de azul y grana.

Tampoco resolvió Messi ante el City desde los once metros. Segundo asalto para el Barça, el día 18. Esta vez en su feudo, ante su público. Liga de Campeones, palabras mayores. La renta en este caso es mínima (1-2). Si el Barça juega a lo que jugó en Manchester lo tiene hecho. Lo contrario sería ver a un Barcelona vacilante, como el que se vio el pasado sábado en Granada. Algo que el City, que irá a matar a morir, no estará dispuesto a perdonar.

La última cita será de traca. En el Camp Nou se jugará el día 22 el clásico número 230. Allí, Barcelona y Real Madrid volverán a ofrecer la madre de todas las batallas. La Liga en juego, al menos ese es el titular que vende. Esto es fútbol. Queda mucha travesía, y muchos campos aun donde se ganan y se pierden ligas. Pero está claro que el que salga triunfante será un poco más campeón que el otro.

Un mes determinante. En el que los culés pueden fantasear con las mieles de la gloria o por el contrario finiquitar la temporada de manera anticipada. Como se suele decir a estas alturas de temporada, depende de sí mismo. Que hable el fútbol.