Imagen: Jacob Gila.
El Real Jaén, que se presentaba anoche ante unos siete mil aficionados con un partido delicioso frente al Granada, ofreció una muy buena imagen -pese a la derrota- y firmó su declaración de intenciones: volverán a defender un estilo de juego ofensivo basado en la presión arriba y en largas posesiones de balón. Sin embargo, la principal atracción de la noche, con el permiso de nuestros vecinos de la Liga BBVA, fue el debut en La Victoria de los nuevos fichajes. Ocho de las nueve incorporaciones presentaron sus credenciales ante el exigente pero entregado público jienense.
En el equipo titular, Manolo Herrero alineó a cinco de los nuevos: Jose y Alex Cruz, Kitoko, Víctor Curto y Jona. Más tarde, pasada la hora de partido, entraron Hugo Álvarez, Edgar y Jozabed.
Alex y Jose Cruz cuajaron una actuación notable. Situados en los laterales (Alex en la izquierda y Jose en la derecha), nadie logró hacer daño por los costados, taparon bien a sus marcas y se atrevieron a proyectarse en ataque.
Kitoko inició el partido en el centro del campo junto a Juanma Espinosa. El congoleño ha llegado al Real Jaén con la difícil misión de ofrecer una alternativa a la opción de Óscar Quesada. Ayer, ante un rival como el Granada, Kitoko aportó equilibrio y criterio en la salida de balón, y demostró que es mucho más que un centrocampista puramente defensivo.
Víctor Curto actuó en la media punta y se movió con mucha inteligencia entre líneas. A los ocho minutos se quedó sólo dentro del área y Roberto tuvo que emplearse a fondo para sacarle un remate muy potente. En esta acción pudo hacer el segundo gol del Real Jaén. Intercambió posiciones con Fran Machado y supo leer su papel en el terreno de juego. Tiene calidad de sobra para afianzarse en el equipo titular.
Jona fue la punta de lanza de este nuevo Real Jaén. El delantero granadino es rápido, tiene mucha movilidad y se defiende muy bien en el juego aéreo. Sus constantes desmarques mantuvieron en jaque a la defensa nazarí y abrieron muchos espacios durante la primera parte. Le faltó el gol.
Hugo Álvarez salió una vez superada la hora de partido y también dejó buenas sensaciones. Central fuerte, fiable y con buena salida de balón. Peligroso cuando se suma al ataque en acciones a balón parado.
Edgar cumplió su labor de abrir el campo y se destapó como un extremo habilidoso, descarado y veloz que -como demostró anoche- se siente muy cómodo jugando a pierna cambiada. A falta de siete minutos para el final, recogió un balón en banda izquierda, tiró una diagonal hacia dentro y sacó un tremendo disparo que Roberto desvió al larguero. No paró de pedir balones durante los veinticinco minutos que jugó.
Jozabed formó pareja junto a Damián en el centro del campo y ambos recuperaron la posesión para el Real Jaén. El joven medio centro sevillano hizo gala de una calidad exquisita y supo asociarse con el resto de compañeros. Jugó fácil y rápido. No cometió errores.
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