Los sueños se cumplen pero no tienen nada que ver con la casualidad. No sé el recorrido que tiene todavía este Atleti ni si logrará cerrar una temporada histórica tomando Lisboa y volviendo a ganar una final al Real Madrid. Lo que he visto en Barcelona es una demostración de que, la mente, es el aliño indispensable para que el trabajo dé frutos. Descompuestos por un gol que les quitaba “su” título de Liga, despojados de dos emblemas, Costa y Arda, los hombres de Simeone, una figura mezcla de entrenador y predicador, se reinventaron para no dejar que el Barcelona encontrara alguna versión de aquel equipo imbatible de no hace tanto. Solo una fortaleza mental muy bien entrenada puede lograr que un equipo juegue contra el Barça, lo haga en campo del rival y con el vértigo de poder perder una Liga, sin acusar el mareo de la fatalidad que puede dejarles sin algo que han tenido durante mucho tiempo.
Jugar de memoria es una virtud y hacerlo con la intensidad que lo hace el Atlético de Madrid una consecuencia de muchos entrenamientos y de muchos discursos de motivación. La palabra es la sustancia que engrasa y hace posible el movimiento para ejecutar lo entrenado. El mérito está en lograr que lo que se dice sea lo que se hace y que, lo hecho, genere los rendimientos previstos. De aquí nace la fe que mueve montañas y gana Ligas en territorio hostil. El Atleti se lo complicó la vida en los últimos partidos, en un ejercicio de patosos de primera, para resolverlo a su modo y recuperar lo que era suyo, por narices. Cada uno gana como quiere y este es el modo rojiblanco. Nada que objetar.
A partir de ahora todos miran a Lisboa pero esa será otra historia que el Cholo ha comenzado a preparar en la misma rueda de prensa del Camp Nou: “Este equipo tiene mejor respuesta cuanto mayor es el reto” Claro mensaje para lo que les espera, ante un Real Madrid que se bajó de la Liga con la excusa de tener la cabeza en la Champions. La duda está en si, logrado el premio de la Liga, Simeone podrá mantener la intensidad para el reto de los retos. Habrá que ver también si Real Madrid ha vuelto de sus vacaciones para competir o si la victoria frente a Guardiola fue tan rotunda y generó tantos halagos que la recibieron como un título que sacia. Ya queda menos para saberlo.
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