Inicio Polideportivo Ciclismo Bouhanni derrota al viento

Bouhanni derrota al viento

Compartir

Nacer BouhanniNacer Bouhanni ha sumado su segundo victoria en lo que va de Vuelta a España 2014 tras ser el más rápido en el sprint de Albacete. La jornada, de perfil llano y kilometraje alto, estuvo marcada en su último tramo por los abanicos que se produjeron en el pelotón a causa del viento.

207 kilómetros y ninguna elevación que dificultara el paso del pelotón entre Baeza y Albacete. Esas eran las premisas iniciales para una etapa de las llamadas ‘de transición’ en las que los ciclistas intentan salvar el recorrido sin gastar demasiado y siendo casi invisibles. Se sabía que no llegaría ninguna fuga -como así fue- y se sabía sobre todo que a la ciudad manchega se accedía a través de una inacabable recta abierta de par en par. En ciclismo, esa conjunción sólo significa una cosa: si sopla el viento, el pelotón sufre.

El plan se cumplió sin desvío alguno. A 30 kilómetros de meta, con la escapada del día cazada hacía mucho, el grupo entró en la fatídica recta que todos tenían en mente a más de 50km/h y el Team Sky de Chris Froome no dudó en tirarse a la cuneta para dejar que el viento corriera libre hasta el corazón del pelotón.

Se enfilaron todos y la línea multicolor de ciclistas se tensó hasta decir basta. Los primeros damnificados quedaron atrás y ya no volvieron a saber de la cabeza de carrera. Visto el éxito cosechado, un nuevo arreón del equipo británico no tardó en llegar y a la fiesta se unió el BMC. Esa segunda vez los cimientos temblaron. Atrás quedaron Nairo Quintana y Dan Martin -dos de los favoritos- junto al alemán John Degenkolb, convencido de disputar la etapa. Y gracias al esfuerzo de los gigantones del Giant-Shimano por recuperar los metros perdidos pudieron respirar el Movistar y el Garmin.

Para entonces lo que quedaba de pelotón se adentró en los últimos kilómetros desbocado y anunciando sprint abierto. No dudaron en apuntarse a la fiesta Tom Boonen, Peter Sagan o Michael Matthews, pero sólo este último estuvo cerca de la victoria. El australiano fue el único que plantó cara a Nacer Bouhanni, poniéndoselo tan difícil que al francés no le quedó más que utilizar una triquiñuela gris para asegurar su triunfo. Forzó un bandazo hacia el corredor por el que avanzaba Matthews y la lucha quedó cerrada. Por suerte para Bouhanni, ni el viento ni los jueces lo frenaron en Albacete.